De acuerdo con datos de las autoridades estatales y de asociaciones civiles, en Oaxaca al menos 3 de cada 10 personas mayores de 60 años y más que viven en sus casas, son violentadas por sus mismos familiares, mientras otros padecen abandono, pobreza y enfermedades crónicas.
En los últimos años, el número de personas mayores de 60 años de edad que recorren las calles del Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca, vendiendo productos de temporada o dulces regionales, ha aumentado debido al abandono que padecen.
Tan sólo en el primer cuadro del Zócalo de la ciudad capital, todos los días se observan ocho ciudadanos de más de 60 años de edad, quienes cargan sus cajas chicleras ofreciendo golosinas y otros productos para poder obtener algún tipo de ingresos.
Por miedo a represalias de sus familiares, la mayoría omite comentar sobre la situación en que viven en sus hogares o de la necesidad que los obliga a deambular en las calles para ofrecer sus golosinas, algunos incluso con dificultades para caminar y para expresarse.

Según datos de la Comisión Permanente de Grupos en Situación de Vulnerabilidad del Congreso local, en Oaxaca al menos 3 de cada 10 personas mayores de 60 años de edad y más que viven en sus casas, son violentadas por sus mismos familiares.
Los datos advierten que, ante el temor de sufrir represalias o abandono por parte de sus familiares, solamente 1 de cada 24 casos de violencia que vive este sector de la población se denuncia ante las instancias de procuración de justicia.
Hasta el 2020, en México vivían 15.4 millones de personas de 60 años o más, de las cuales 1.7 millones viven solas, sólo el 41.4 por ciento son económicamente activos y el 69.4 por ciento presentaban algún tipo de discapacidad.
En el 2022, de una población de 4.1 millones de personas que habitaban el estado de Oaxaca, alrededor de 480 mil eran personas mayores de 60 años de edad, de las cuales al menos el 31.5 por ciento se encontraban en situación de pobreza.
El reporte de las autoridades estatales advierte que otro sector de esta población padece violencia familiar, sexual, económica, psicológica o patrimonial; en su mayoría son provocados por sus mismos familiares o de personas que se encuentran a su cuidado.