Sin placas de circulación, un auto Audi bloqueaba la semana pasada una rampa para personas con discapacidad (PCD) en las calles Sabinos y Jazmines, en la colonia Reforma. Por media hora, según el reporte ciudadano, una camioneta obstruyó también la ciclovía de la calle García Vigil, a las puertas del Centro Gastronómico.
El paso peatonal y la rampa para PCD fueron bloqueados por un auto rojo en las calles Emilio Carranza y Fuerza Aérea. Una situación similar ocurrió varias veces en el jardín Conzatti. En tanto, los autos en dobles filas, sobre pasos peatonales, en lugares exclusivos y en lugares prohibidos fueron incontables en la colonia Díaz Ordaz, en la avenida Benito Juárez y otras partes del Centro Histórico.
En la capital oaxaqueña, calles como Berriozábal son constantemente usadas para estacionamiento aun cuando las marcas en la vialidad señalan que está prohibido. Como esta conducta, los cajones de estacionamiento destinados para carga y descarga o ascenso y descenso son ignorados.
Las dobles filas proliferan en Guerrero, 5 de Mayo y otras tantas. Estas infracciones al reglamento de Vialidad Municipal son constantes, aunque no siempre se sancionan. Sin embargo, ponen en riesgo a peatones y ciclistas.
De acuerdo con el artículo 60 del reglamento, entre las prohibiciones que tienen las y los conductores de v
ehículos de motor están el estacionarse en doble fila. Asimismo, está prohibido el “obstaculizar los pasos destinados para peatones y rampas exclusivas para el uso de las personas con discapacidad”.
Cuando se trate de cajones para carga y descarga o para ascenso y descenso, también se aplican otras prohibiciones, según explica la Dirección de Vialidad. Estos espacios deben de ser usados para los que se expidió en su autorización anual correspondiente, por lo cual no deberán ser usados como estacionamientos.
Sin embargo, se han observado vehículos que por varios minutos y sin maniobra alguna emplean estos cajones ubicados generalmente en establecimientos comerciales o de servicios.
