Es necesario reformar la Ley Agraria, la Ley General de Asentamientos Humanos y su normatividad con el objetivo de incorporar procedimientos ágiles para regularizar la tierra social que se encuentra en las zonas urbanas.
Debido a que las principales ciudades de Oaxaca presentan un crecimiento desordenado que ocasiona cambios en el uso de suelo, es urgente que su tierra pueda ser destinada al desarrollo urbano y vivienda, dijo José Guadalupe Cruz Urbieta.
Presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi) Delegación Oaxaca, admitió que actualmente su ausencia afecta negativamente el desarrollo local e incide al mismo tiempo en los índices de competitividad.
Al contar con un marco legal adecuado, se podrá disponer de suficiente suelo para el desarrollo ordenado de las ciudades, se evitará la especulación del suelo y se podrán satisfacer las necesidades de vivienda, equipamiento urbano y se fomentará el desarrollo regional.
El dirigente empresarial precisó que Oaxaca tiene una superficie total de 9.5 millones de hectáreas, poco más de 75% son propiedad social, es decir, pertenecen a comunidades, ejidos y colonias agrícolas.
Aunado a ello, la marginación es un elemento que influye significativamente en el tema de vivienda, pues deriva de la combinación de una enorme dispersión poblacional en una superficie que es en 70% montañosa.
Lo cual implica gran dificultad para hacer llegar la infraestructura social y productiva a las localidades, así como el encarecimiento de los bienes y servicios, resaltó.
Asimismo, se pronunció por redoblar la atención a los centros urbanos de menor dimensión que presentan obstáculos para una urbanización ordenada debido a la accidentada orografía y a la carencia de infraestructura y servicios.
Reconoció que los asentamientos espontáneos, marginales, descontrolados o informales son formas de hábitats precarios establecidos en su mayoría en zonas urbanas, creados por un sector de la población sin los permisos de los organismos competentes.