Luego de las adecuaciones al área en que operará en el playón del río Atoyac, el municipio de Oaxaca de Juárez iniciará las pruebas con la nueva compactadora de desechos inorgánicos y así aumentar el volumen de residuos para su aprovechamiento en la planta cementera de la Cruz Azul.
La compactadora es la segunda adquirida por el ayuntamiento para tratar parte de los residuos que se generan en la ciudad y como una de las soluciones para enfrentar la crisis por el manejo de los desechos ante la falta de un relleno sanitario propio. La primera máquina fue una de menor tamaño con la cual empezaron pruebas para producir pacas de desechos para termo destrucción.
Fue en diciembre del año pasado cuando el ayuntamiento dio a conocer la compra de esta prensa horizontal o compactadora tras una licitación pública y cuyo costo fue de 2.5 millones de pesos, según lo informado por el ayuntamiento.
En el año 2023, el ayuntamiento de Oaxaca de Juárez envió aproximadamente 120 toneladas de desechos inorgánicos no reciclables a la cementera Cruz Azul. Estos traslados, como ha señalado en varios momentos el ayuntamiento, no generan gastos a la administración, en tanto que son llevados en los mismos vehículos de la cementera luego de haber descargado su material. Tampoco implican ganancias económicas al ayuntamiento, pues no recibe pago por estos desechos.
Abelardo Ruiz, coordinador del programa de separación de residuos sólidos urbanos del municipio, ahondó que a raíz del convenio firmado entre el ayuntamiento y la cementera hay un beneficio ambiental porque de acuerdo con la norma vigente se pueden usar residuos para combustible en hornos de empresas como estas.
Este 2024 se espera incrementar considerable el volumen luego de la adquisición de la compactadora de mayor tamaño, misma que iniciará sus pruebas en una semana, aproximadamente, tras las adecuaciones al sitio de trabajo, explicó.
