Inflación en el mercado inmobiliario; trabas para construir vivienda social

En Oaxaca, hay bienes e inmuebles cuyo precio supera los 20 millones de pesos, sobre todo en zonas de mayor plusvalía como el Centro Histórico o la agencia municipal de San Felipe del Agua, en la capital; pero por otro lado, en la Central de Abasto los locales comerciales en venta superan los 3 millones de pesos, señalan corredores inmobiliarios. 

El presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios, Sección de Oaxaca de Juárez, Carlos Alberto Roque Montes, indicó que el precio de los terrenos, construcciones e inmuebles del Centro Histórico se cotizan a precios muy elevado que llegan hasta los 53 mil pesos el metro cuadrado, sobre todo aquellas propiedades situadas a una cuadra del zócalo.

En la ciudad capital también destaca la agencia municipal capitalina de Guadalupe Victoria, así como la colonia Reforma, al norte de la capital y que se ha convertido en zona comercial por lo que el valor de las propiedades es inalcanzable, y están destinadas apenas para un determinado sector de la población con amplias posibilidades económicas. 

Y es que, según datos oficiales, Oaxaca es el cuarto estado con los precios más elevados para construir y en donde el 55% de las personas que rentan lo hacen porque carecen acceso a la vivienda.

Esas propiedades se valuán en cantidades superiores a los 35 millones de pesos. 

“Pero queda claro que esa capacidad económica es de gente de que llega a Oaxaca dado que en la ciudad no hay capacidad económica, mucho menos en la entidad, para comprar con esas sumas. Lo que está pasando es la gentrificación, en donde las personas ofrecen y venden sus sus propiedades y dan paso a otros dueños; pero el Centro Histórico ha cambiado su vocación y está más destinado para el comercio”, dijo. 

De acuerdo con Roque Montes, en la Cascada hay una vivienda en venta de 20 millones de pesos, en el Ejido Guadalupe Victoria se cotizan en 23 millones y en la parte alta se pide 30 millones de pesos, en ese caso, se trata de viviendas de buen tamaño. 

Por eso, la zona norte de la capital es donde es más cara la vivienda debido a las condiciones que ofrecen como focos de inversión. 

El especialista en el tema inmobiliario indicó que en el caso del Centro Histórico y la colonia Reforma, los bienes se destinan al comercio de manera preferente y en un porcentaje menor se da uso para vivienda. 

No obstante, en el caso de la Central de Abasto se encuentran los bienes más pequeños y más caros, por ejemplo, una caseta regular, la llegan a vender en más de un millón de pesos. 

El especialista en este tema, indicó que el mercado es variable, pero la ciudad de Oaxaca es cara debido a que alguien vende en un alto valor y el valor de los bienes inmuebles lo fija directamente el mercado inmobiliario. 

No hay terreno para fraccionamientos 

Por otra parte, el presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios, Sección de Oaxaca de Juárez, Carlos Alberto Roque Montes, expresó que en el caso de la casa de interés social prácticamente carece de oferta a pesar de la necesidad y la alta demanda de potenciales compradores. 

“El mercado de vivienda de interés social se ubica sobre los 600 y 800 mil pesos por vivienda; está débil, casi es nula la oferta y nadie está construyendo hoy día ese tipo de vivienda, porque al desarrollador le es complicado conseguir un terreno accesible y a buen precio, los disponibles son inalcanzables, están muy caro”, indicó. 

Estimó que para una vivienda media el valor del metro cuadrado en el mercado se encuentra entre los 8 a 10 mil pesos y por eso, al proyectar construir en un espacio de cien metros cuadrados es necesario invertir 560 mil pesos más los 300 mil pesos del terreno por lo que plantear una construcción de vivienda media representa una inversión de 900 mil pesos, cifra alejada de muchos de los posibles demandantes. 

Ahora es complicado encontrar un terreno que cueste 300 mil o menos cerca de los centros de trabajo en Oaxaca debido a la característica de la tierra que es social, de propiedad ejidal o comunal; a ello sumamos que, por ser tenencia social no es susceptible de crédito. 

“Sólo 20% de la tierra es de propiedad privada y además, no existen reservas territoriales para buscar desarrollos y las personas que desarrollan vivienda se les complica proyectar una casa de interés social”, indicó. 

Ejemplificó en desarrolladores que construyeron en espacios alejados del centro por lo que quedaron deshabitados como las unidades habitacionales o fraccionamientos localizados en Tlacolula, por la distancia de los espacios de trabajo. 

Debido a todo este esquema, las personas desarrolladoras buscan espacios en otros lados para las construcciones.