A un año de haber asumido la presidencia de Argentina, Javier Milei ofreció este martes un discurso a la nación, rodeado de su gabinete, en el que declaró que “la recesión terminó” y que el país se encuentra en un proceso de recuperación económica. Durante su intervención, el mandatario destacó que la economía argentina está comenzando a crecer, afirmando que el país llega al final del año con “alivio” y que ya puede “dejar atrás lo peor”, aunque advirtió que aún no se ha alcanzado el “puerto” de la estabilidad económica.
“Estamos saliendo del desierto: la recesión terminó y el país finalmente ha comenzado a crecer”, indicó Milei.
El mandatario argentino también aseguró que en 2025 implementará una reducción del 90 por ciento de los impuestos, como parte de su plan de reformas económicas.
LOGROS Y DESAFÍOS DEL GOBIERNO DE MILEI
Milei repasó los logros de su gestión, destacando la histórica disminución de la inflación y la reducción del empleo público, un tema central en su mandato. El presidente también anunció que el próximo año será el de la “motosierra profunda”, una expresión que hace referencia a su plan de continuar con una serie de recortes en el sector público.
Agradeció a los argentinos por el “conmovedor sacrificio” que hicieron durante este primer año de su gobierno, asegurando que no será en vano. Además, se comprometió a intensificar la lucha contra la delincuencia, mencionando que el gobierno no parará hasta que quede claro que “el que las hace, las paga”.
Entre sus propuestas en materia de seguridad, destacó la creación de una ley antimafia, una reforma de la Policía Federal y una ley antiterrorismo.
EL FUTURO ECONÓMICO Y POLÍTICO DE ARGENTINA
A nivel internacional, Milei afirmó que Argentina ya no es “un hazmerreír mundial”, y destacó la influencia de su gobierno en el diseño de políticas desregulatorias, señalando que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha estructurado su Ministerio de Desregulación “a imagen y semejanza” del modelo argentino. En este sentido, Milei también mencionó su objetivo de impulsar un tratado de libre comercio con Estados Unidos, un acuerdo que consideró “debió haberse realizado hace 19 años”.
El presidente también aprovechó la ocasión para dirigirse a la oposición y los sindicatos, lanzando una advertencia sobre su negativa a tolerar obstrucciones a sus reformas.
“Los argentinos no tolerarán obstrucciones insensatas a nuestras reformas”, afirmó, y añadió que quienes se opongan a su visión de progreso serán “arrollados por él”.
PENDIENTES Y DESAFÍOS
Si bien Milei se mostró optimista respecto a la situación económica, el presidente argentino aún enfrenta varios desafíos importantes. La promesa de reducir impuestos y continuar con las reformas estructurales se encuentra con la resistencia tanto de la oposición política como de sectores clave como los sindicatos y algunos medios de comunicación. Además, en términos de seguridad, su gobierno deberá implementar las reformas propuestas y manejar la compleja situación de violencia y crimen en varias provincias del país.
En cuanto a su política exterior, la relación con Estados Unidos y su propuesta de un tratado de libre comercio será un tema importante para los próximos años, mientras continúa posicionando a Argentina en el ámbito internacional como un actor con un proyecto económico y político de corte ultraliberal.
El próximo año, según Milei, marcará una etapa decisiva en la construcción de lo que él denomina “la nueva Argentina”, un país que, según él, ha comenzado a salir de la crisis, pero que aún tiene mucho camino por recorrer.