Sergio Chirino tuvo un regreso triunfal al encordado, tras superar el fin de semana al regiomontano Irving Turrubiartes, por decisión unánime, en peso pluma, durante la cartelera de Box Azteca, celebrada en la Ciudad de México.
Después del triunfo, el ex seleccionado nacional confesó que tuvo un digno adversario y ahora piensa en buscar otra oportunidad para pelear por un cinturón de campeón mundial.

AHORA O NUNCA
“Sabíamos que teníamos a un gran rival, con una sola derrota y no fue con cualquier rival. Fue una gran prueba y la pudimos superar”, indicó el oaxaqueño al final del pleito pactado a 10 rounds, en el marco del aniversario que le realizó la Box Azteca, a Don Lama, por sus 50 años de trayectoria.
MENTALIDAD ESENCIAL
Asimismo, aseguró que la mentalidad ha sido clave en su regreso, tras perder hace 10 meses su pelea por el campeonato del mundo contra Rafael “Divino” Espinoza.
“La mentalidad que tiene un boxeador arriba del ring, o te detiene o te impulsa.
Y yo creo que en Las Vegas la mentalidad no encajó con el cuerpo y creo que fue una derrota que talvez pudimos haber cambiado esa pelea”, precisó.
A pesar de ese duro tropiezo, el avecindado en Santa Lucía del Camino, dijo que el aprendizaje fue importante y lo canalizó para mejorar.
“Fue una gran oportunidad (la pelea por el título mundial), aprendimos muchísimo y creo que queremos otra vez esa vía mundialista”, enfatizó.

EN BUSCA DE CAMPAMENTO
Tras evaluar la posibilidad de una pelea de campeonato, Sergio Chirino consideró que necesita una mejor preparación.
“Primero queríamos ganar esta pelea para hablar con la empresa y buscar la mejor oportunidad de hacer campamentos, porque lamentablemente en mi estado es muy difícil hacer un campamento, porque no hay boxeadores profesionales al nivel para que yo pueda trabajar”, lamentó.