¿Por qué no utilizar Barmicil y sus genéricos en niños y niñas?

La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) emitió un comunicado en el que advierte sobre los peligros para la salud asociados al uso indiscriminado del medicamento Barmicil, en su presentación en crema, así como de sus genéricos que contienen la combinación de betametasona, gentamicina y clotrimazol.

La betametasona es un potente corticosteroide, la gentamicina es un antibiótico y el clotrimazol es un antimicótico. El uso irracional de productos que contengan esta combinación de sustancias representa un riesgo grave para la salud, especialmente en la población infantil.

El uso excesivo y prolongado de estos medicamentos puede ocasionar reacciones adversas sistémicas, como aumento de la presión arterial y elevación de los niveles de glucosa en sangre. Además, pueden provocar reacciones adversas graves, como osteoporosis o el síndrome de Cushing, caracterizado por la aparición de una cara redonda y hinchada, debido a la acumulación de grasa en la cara y el cuello, mientras que los brazos y las piernas se vuelven más delgados. En los niños, esto puede resultar en obesidad y un crecimiento más lento.

Estos medicamentos son recetados para el tratamiento de diversas enfermedades dermatológicas debido a sus propiedades antiinflamatorias, antifúngicas y antimicrobianas. Si se utilizan bajo la supervisión de un profesional de la salud, son seguros y eficaces. Sin embargo, su uso sin una prescripción médica adecuada puede causar reacciones adversas graves.

Por lo tanto, la Cofepris recomienda que el uso de Barmicil y los productos genéricos que contienen betametasona, gentamicina y clotrimazol se realice únicamente bajo estricta supervisión médica. Es importante seguir las indicaciones y prescripciones médicas para garantizar un uso seguro y evitar riesgos innecesarios para la salud.

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