Ni la advertencia de asociaciones médicas en el riesgo de un colapso por Covid-19, ni el aumento de casos, decesos y ocupación hospitalaria, evitó que Oaxaca cambiara de color en el semáforo epidemiológico de riesgo, donde se mantendrá en naranja por otras dos semanas.
El Gobierno federal decidió este viernes que la entidad se mantendrá en naranja del 18 al 31 de enero, aunque en las últimas semanas presentara un repunte en los contagios y el número de hospitalizados.
Pese a los llamados de los trabajadores de la salud para pasar de manera urgente al rojo, las autoridades federales hicieron caso omiso y a partir del lunes el color seguirá en naranja. Ante ello, el Gobierno del Estado está en facultades para aceptar o rechazar la disposición de la federación.
En la conferencia vespertina de la Secretaría de Salud federal, se resaltó que Oaxaca se encuentra entre las entidades con riesgo a pasar al rojo, si en las próximas semanas no reduce la incidencia de contagios.
Sin embargo, ayer el estado presentó 248 nuevos positivos y seis decesos más, además del registro de 14 hospitales con ocupación del 100%, 299 camas disponibles y 368 ocupadas, así como cuatro nuevos hospitalizados.
El panorama estatal mostró que Oaxaca acumuló hasta ayer 31 mil 159 positivos y 2 mil 278 defunciones, además de 4 mil 748 casos sospechosos en proceso de análisis por laboratorio.
Los 248 nuevos positivos tuvieron registro en 66 municipios, con mayor número en Oaxaca de Juárez (98), Santa María Atzompa (20), Santa Lucía del Camino (18) y San Sebastián Tutla (9).
Los nuevos decesos tuvieron registro en personas de 44, 47, 49, 55, 56 y 77 años de edad, originarios de Oaxaca de Juárez (2), Santa Cruz Xoxocotlán, San Martín Toxpalan, Salina Cruz y San Juan Bautista Tuxtepec, todos con alguna comorbilidad como la obesidad, diabetes o hipertensión arterial.