Siguen muriendo en Oaxaca niños por males intestinales y respiratorios
Son enfermedades prevenibles; 25 infecciones intestinales y 62 por respíratorias
Las enfermedades infecciosas intestinales y respiratorias agudas generaron el deceso de decenas de menores de cinco años de edad en 2023 en Oaxaca, manteniéndose como las principales causas de mortalidad en este grupo de edad de la entidad.
De acuerdo al Sistema Único de Información para la Vigilancia Epidemiológica, Oaxaca notificó 25 decesos en niñas y niños menores de cinco años por enfermedades infecciosas intestinales, así como 62 por infecciones respiratorias.
Aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que más de la mitad de las muertes de menores de cinco años de se deben a enfermedades prevenibles y tratables mediante intervenciones simples y asequibles, en Oaxaca siguen muriendo decenas de niñas y niños por EDAS e IRAS cada año.
En 2010, por ejemplo, la entidad reportó 55 decesos por EDAS y 71 por IRAS y en 2017 fue de 27 y 57, respectivamente. A varios años de distancia, no hay cambios drásticos en los registros, porque Oaxaca se mantiene entre los principales estados con la mayor mortalidad y no hay acciones concretas en la prevención de este alto número de decesos.
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Por casos acumulados de enfermedades infecciosas intestinales, Oaxaca se ubicó en octavo lugar en el país por la mayor incidencia, sobre todo en las jurisdicciones de Valles Centrales y el Istmo de Tehuantepec.
En lo que va de este 2024 se tiene un registro de poco más de 2 mil casos, de los cuales, el grupo más afectado es el de 25 a 44 años con 531 casos, seguido de los de 1 a 4 años con 367 y los de 5 a 9 con 304.
En infecciones respiratorias agudas, Oaxaca concluyó 2023 en el noveno lugar del país con más de 600 mil casos confirmados, con mayor registro también en Valles Centrales y el Istmo de Tehuantepec, por su alta concentración poblacional.
Junto con Oaxaca, otros estados como Chiapas, Puebla y Guerrero también presentan elevados registros en decesos en menores de cinco años de edad, pese a las promesas gubernamentales de velar por la salud y bienestar de estos grupos poblacionales.