Temen por la vida de María Elena
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Temen por la vida de María Elena

En este año, según cifras de organizaciones civiles, ha repuntado la violencia contra las mujeres. Al menos 130 han sido asesinadas.


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Familiares de María Elena Ríos, la joven saxofonista que fue agredida con ácido el 9 de septiembre en Huajuapan de León, reconocieron ayer que temen por su vida, ante las declaraciones que han realizado sobre esta agresión, “y que pudieran incomodar a los presuntos responsables”.

Ante ello, por medio de una carta dirigida al Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, le pidieron brindar seguridad a la joven que ahora se encuentra hospitalizada en la Ciudad de México, así como a sus familiares.

Silvia Ríos Ortiz, hermana de María Elena señaló que “a tres meses de la delicada situación de salud” de su hermana y con afectaciones severas en su rostro y cuerpo, por el ataque que recibió, apenas el 13 de diciembre fue trasladada al Instituto Nacional de Rehabilitación para quemados en la Ciudad de México.

“Señor, Presidente, el pasado 06 de octubre durante una gira de trabajo que realizó en la mixteca oaxaqueña, me acerque a usted para que escuchara mi petición. Debido a las irregularidades que se suscitaron durante estos tres meses, me dirijo a usted nuevamente para pedirle ayuda y que sepa usted que temo por la vida de mi hermana y la de mi familia”, expuso.

Ríos Ortiz pidió también que, por todo lo que han pasado durante estos meses, por cuestiones económicas y el largo proceso que María Elena tendrá que pasar, así como lo elevado de todos los gastos que esto implica, el servicio de salud sea gratuito y especializado.

“Mi hermana no cuenta con un seguro y por nuestra situación económica, me impide pagar los altos costos de una rehabilitación. Mi familia está desesperada. Pido justicia y una investigación profunda y transparente para la captura de los responsables, que la Fiscalía del Estado, presente a los responsables; que no exista encubrimiento por parte de las autoridades”.

Del mismo modo, consideró necesario reclasificar este delito; “que no sean solo lesiones, ya que en el Código Penal del Estado de Oaxaca no está tipificado como delito el “ataque con ácido”, puntualizó.

 

Largo tratamiento

María Elena presenta lesiones provocadas por el ácido en gran parte de su cuerpo y cara, por lo tanto, según el diagnóstico médico, se mantendrá en hospitalización por otros meses más, dada la magnitud del daño.

Previo a su traslado a un hospital especializado en la Ciudad de México, el viernes por la tarde, reportes médicos del Hospital General “Dr. Aurelio Valdivieso” advirtieron que la cicatrización de las lesiones de la joven de 26 años requiere más tiempo y la evolución es más compleja.

La joven fue atacada cerca de su domicilio, cuando se encontraba acompañada de su madre, por un sujeto que aún no ha sido aprehendido.

El diagnóstico inicial, al momento de su ingreso al Hospital Civil hace tres meses, fue “quemadura por agente químico en región facial y miembros torácicos”.

El daño en la joven saxofonista, quien días antes de la agresión había participado en el Primer encuentro de directores de bandas de música de Oaxaca, presenta las lesiones en cara, cuello, tórax, miembros torácicos y pélvicos

Originaria de Huajuapan de León, considerada una zona de alta violencia feminicida y con alerta de género desde agosto de 2018, la joven María Elena fue trasladada el pasado viernes a la Ciudad de México, para recibir atención especializada.

 

Rechaza injertos

Antes, en los reportes médicos, se señalaba que las lesiones de la joven evolucionaban de manera insidiosa, debido al agente químico, “ameritando injertos de piel en la zona periocular izquierda, tórax anterior y ambos miembros torácicos, cursando con necrosis de injertos en algunos sitios”, donde era necesario volver a aplicar injertos.

En el Hospital Civil, donde estuvo internada tres meses, se le realizaron tres intervenciones quirúrgicas, porque el “ácido corrosivo” provocó lesiones profundas en la paciente.

María Elena fue enviada al Centro Nacional de Investigación y Atención de Quemados (CENIAQ) del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) “Luis Guillermo Ibarra Ibarra”, en la Ciudad de México, donde continuará su atención médica hasta su recuperación.


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