Aunque señala estar en contra de regular las manifestaciones y marchas, como se ha tratado de hacer desde el congreso local en varias ocasiones, la regidora Mirna López Torres señala que es necesario atender las causas de la protesta social en sus múltiples expresiones. Sin embargo, se pronuncia por aplicar la ley cuando este tipo de expresiones afecten el patrimonio artístico y cultural en ciudades como Oaxaca de Juárez.
En los últimos meses, varias organizaciones y grupos han llevado sus exigencias al espacio público, en donde piden atención de los gobiernos, principalmente del estatal y el federal. Pero a la par de esto se impide el libre tránsito de otras personas, quienes han de caminar, transbordar o evitar las zonas afectadas para llegar a sus destinos.
Una de las protestas que ha escalado en el último mes es la de estudiantes normalistas con el cierre de vialidades. Pero como ellos otros grupos de la sociedad civil e incluso autoridades de otros municipios han recurrido a los cierres viales como medida de presión hacia el gobierno estatal.
López Torres, concejal de Derechos Humanos y Asuntos Indígenas, dice que “normar las marchas y bloqueos no es la vía”. Además explica que hay demandas que no competen al ayuntamiento sino al estado o la federación, pero que se dan en el territorio capitalino.
“Durante muchos meses tuvimos bloqueada la avenida Juárez (por personal de salud eventual) y eran demandas que se hacían al gobierno del estado, al gobernador”.
Emanada del Partido Acción Nacional y al ser una de las concejales de oposición en esta administración municipal que encabeza el partido Movimiento de Regeneración Nacional pide, en cambio, que estas expresiones de la libertad de manifestación deben ser atendidas por los gobiernos de los tres órdenes, según las demandas.
Hay una libertad de manifestación, pero debe de haber como principal fuente o meta la atención, esa respuesta”, señala la funcionaria al tiempo de pedir una evaluación a las y los funcionarios del porqué no se atiende y responde a las demandas sociales.
Debe ser el termómetro político que nos permita como servidores saber qué se está dejando de hacer y por qué no hay respuesta”.
Sin embargo, dice no comprender el tema de los normalistas, de quienes la administración estatal ha asegurado que hay respuesta y atención a sus demandas, pero los manifestantes señalan lo contrario.