Después del enfrentamiento armado de este jueves en alrededores del Mercado de Abasto Margarita Maza de Juárez, conocido como Central de Abasto, el ayuntamiento capitalino aseguró que no volverá a ocurrir un hecho como este ni se permitirá que organización o sindicato alguno se apropie de las calles en esta y otra parte de la ciudad de Oaxaca.
“Vamos a estar muy al tanto de esta situación, no vamos a permitir que esto vuelva a suceder o que alguna organización o sindicato quiera adueñarse de las calles”, expresó Noé Jara Cruz, secretario de Gobierno y Territorio.
En entrevista, explicó que en la zona hay cerca de 20 organizaciones “fuertes”, así como más de 100, con un aproximado de 50 o 60 que son quienes tienen más agremiados.
En esta zona comercial, incluyendo la zona seca y húmeda, así como sus diversas áreas de tianguis, del mercado Lula’a, bodegas, el mercado Lázaro Cárdenas, entre otras calles cercanas, laboran más de 10 mil comerciantes (entre locatarios, puestos semi fijos y ambulantes), estimó el funcionario.
Por esta actividad, también calculó que en los días de plaza pueden tener presencia más de 30 mil personas.
De acuerdo con el funcionario, en los hechos violentos de este jueves estuvo involucrado “un grupo de choque encabezado por una señora… Se habla de Confederación Libertad”, pero de la que dijo que existe poca injerencia en la ciudad. “Tiene algunos puestos en vía pública, pero es mínimo. Y en el mercado de Abasto, en esa zona comercial tan grande, también tenemos entendido que esta organización tiene algunos agremiados”.
Por la magnitud de la Central de Abasto, Jara Cruz reconoció que “hay injerencia de varios grupos y algunos líderes”. Por ejemplo, en la prolongación de Nuño del Mercado, donde se suscitaron los hechos que dejaron daños materiales, lesionados por golpes y temor.
El enfrentamiento, que de acuerdo con algunos comerciantes también involucró a otro sindicato de transportistas, fue calificado por la Fiscalía General del Estado como una agresión de “grupos de choque vinculados a diferentes organizaciones” en contra de comerciantes de la zona.
Esta calle está invadida desde hace unos 20 años, explicó Jara Cruz, además de asegurar que ante las peticiones de vecinos se ha “dialogado mucho con los líderes (para) que nos permitan trabajar, para ir ordenando”.
Aunque hace mes y medio recibió una queja de comercio a quienes presuntamente amenazó una persona para agremiarse, pero que tras revisar el caso este había llegado a una calma. “Llegaron a un acuerdo, por eso para nosotros ya estaba solucionado”.
Sin embargo, “ayer nos enteramos que fue un grupo de personas ajenas y destruyeron varios puestos, amenazaron, sabemos de dos o tres golpeados, de un dirigente del área de madera que fue golpeado”.
El funcionario reconoció que es necesario reforzar la seguridad en la zona de la Central , pues es un área de alta incidencia delictiva y en la que los 35 elementos de seguridad son insuficientes. “Como mínimo 150 tendrían que estar para salvaguardar el orden”.
Además de que para reducir la incidencia han implementado operativos como el de Pescador, en el que colaboran los gobiernos municipal, estatal y federal. Lo mismo que las estrategias de vecinos por la paz y otras de índole cultural, de rehabilitación de luminarias y poda de arbolado.