Exigen justicia para víctimas de masacre de San Mateo del Mar

Familiares de las víctimas de la masacre de Huazantlán del Río, agencia de San Mateo del Mar, protestaron en distintas sedes en la Ciudad de México para exigir justicia, y que el gobierno de Oaxaca y la Fiscalía actúen para procesar a los responsables de retener, golpear, torturar y matar a  15 personas en pasado 21 de junio de este año. 

En la búsqueda de justicia, los padres, hermanos, abuelos esposos e hijos de las víctimas realizaron un plantón en Palacio de Gobierno, Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y la Secretaría de Gobernación (SEGEGO), con el propósito de buscar que alguien atienda sus demandas.

Los sobrevivientes de la masacre denunciaron que tienen más de un mes sin poder regresar a sus hogares, por el temor de ser asesinados como sucedió con sus paisanos a manos de un grupo de pobladores apoyados por los agentes municipales, presidentes de colonias y de secciones para agredirlos físicamente y quemarlos vivos.

María del Rosario Guerra Salazar, denunció que hasta el momento nadie les hace caso, por ser un asunto de grupos delincuenciales que están incrustados en San Mateo del Mar y que han extendido su red de corrupción hasta Huazantlán del Río.

Samuel Hurtado Pedroza, víctima de la masacre a quien le cortaron la yugular, dijo que ya presentó la denuncia y los testimonios de cómo sucedieron los hechos, pero hasta el momento no se ha iniciado una investigación a fondo.

También Alejandrino Abasolo Mora y Agustina Roldan Terraza, expresaron que ellos acudieron para apoyar a su compañera Marisa Okas Rangel Oviedo quien había sido agredida junto con otras mujeres el pasado sábado 2 de mayo cuando llegó un grupo de aproximadamente 50 personas hasta sus domicilios, encabezadas por José Luis Chávez Salinas, agente municipal de Huazantlán del Río, Teófila Ochoa González, Ponciano Garay, Máximo Leyva, Antonio Pinzón y Reyna Templado.

De esa fecha, dijo que acudieron a la Ciudad de Oaxaca para buscar ayuda por parte de Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO), sin embargo, aún siguen en espera.