Durante el primer semestre de 2018 el rey definitivo de la jungla de tendencias fue el estampado de leopardo, con un animal print satinado que sirvió de complemento perfecto para tantos looks veraniegos.
Lo vimos también en vestidos, zapatos y accesorios. Siempre exuberante y siempre favorecedor. Su fuerza se ha ido apagando a medida que avanza el año para dar paso a otro estampado, igual de seductor e igual de clásico, se trata del print de serpiente.
Predominante en botas, especialmente esas altas hasta la rodilla, también se ha apoderado de prendas de vestir y todo tipo de accesorios. Su color, generalmente piel con toques de gris, resulta ideal para combinarse con otros tonos típicos de esta temporada como el beige o el negro. Pero han sido sus versiones en colores más vivos como el verde o el rojo las que han ganado popularidad entre las mejores vestidas.
Si tuvimos una mitad de año de aires felinos, sus últimos meses serán de onda sigilosa y, por supuesto, hipnotizante.