¿Te has preguntado alguna vez cuánto crece tu cabello en un día? ¿O cómo puedes hacer que crezca más rápido y saludable? ¡Hoy te revelamos todos los detalles para que puedas presumir de una melena más sana y radiante! Desde los factores que influyen en el crecimiento, hasta los secretos mejor guardados para acelerarlo, aquí encontrarás todo lo que necesitas para lograr una cabellera de ensueño.
¿Cuánto crece el cabello en un día?
Es probable que no lo notes a simple vista, pero ¡tu pelo crece más rápido de lo que imaginas! De acuerdo a un estudio publicado en el International Journal of Dermatology el cabello puede crecer alrededor de 0.3 a 0.5 milímetros por día, lo que suma aproximadamente 1 a 1.5 centímetros al mes. ¡Increíble, ¿verdad?!
Factores que ayudan al crecimiento
El crecimiento capilar tiene que ver con muchos factores, entre ellos el tipo de alimentos que consumimos, el estilo de vida que llevamos e incluso la edad, pues se ha demostrado que el pelo crece más rápido entre los 16 y los 46 años, disminuyendo a partir de los 50.
Haz que tu cabello crezca sano y fuerte
Una dieta equilibrada: Consumir alimentos ricos en proteínas, vitaminas y minerales es esencial para fortalecer el cabello desde adentro.
Hidratación adecuada: Mantén tu cuerpo hidratado para asegurar un cuero cabelludo saludable y favorecer el crecimiento.
Cuidado adecuado: Evita el uso excesivo de productos químicos y el calor extremo que pueden dañar tu cabello y provocar su caída.
Evitar el estrés: Altos niveles de cortisol pueden afectar negativamente el crecimiento del cabello, así que busca maneras de relajarte y reducir la tensión.
Corte regular: Eliminar las puntas abiertas ayuda a prevenir la rotura y fomenta un crecimiento uniforme.
Prácticos tips para el cuidado del cabello:
Lavar con suavidad: Utiliza un shampoo libre de siliconas, parabenos y sulfatos, y evita frotar el pelo con fuerza para no dañarlo.
Acondicionador adecuado: Aplica acondicionador solo en las puntas para evitar que el cabello se vuelva graso en las raíces.
Secado delicado: Seca tu cabello con una toalla suave de microfibra y evita el calor directo de secadores y planchas.
Peinado sin tirones: Utiliza un peine de dientes anchos y desenreda el cabello con suavidad para evitar la rotura.
Protección térmica: Si usas herramientas de calor, aplica un protector térmico para minimizar el daño.
Descanso nocturno: Evita dormir con el cabello atado con fuerza, ya que puede provocar que se rompa y debilitar los folículos.