La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) anunció oficialmente los incrementos en las cuotas del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) para el año 2025. Estas medidas, publicadas en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el viernes 27 de diciembre de 2024, afectarán productos como gasolina, cigarros, refrescos y otros bienes gravados con este impuesto.
ACTUALIZACIÓN ANUAL BASADA EN INFLACIÓN
Los ajustes a las cuotas se realizarán anualmente, de acuerdo con lo establecido en el artículo 17-A del Código Fiscal de la Federación. Este mecanismo considera el factor de actualización desde diciembre del penúltimo año hasta diciembre del año inmediato anterior, asegurando que las cuotas se ajusten a la inflación vigente.
IMPACTO EN COMBUSTIBLES
El aumento a los precios para los combustibles, vigentes a partir del 1 de enero de 2025, serán los siguientes:
- Gasolina menor a 91 octanos: $6.4555 pesos por litro.
- Gasolina mayor o igual a 91 octanos: $5.4513 pesos por litro.
- Diésel: $7.0946 pesos por litro.
- Combustibles no fósiles: $5.4513 pesos por litro.
Estos incrementos representan un reto para los consumidores, quienes podrían enfrentar mayores costos en el transporte y la distribución de bienes.
AUMENTO EN CIGARROS Y BEBIDAS SABORIZADAS
En el caso de los productos como tabaco y bebidas azucaradas, también se establecieron nuevos montos:
- Cigarros: $0.6445 por unidad.
- Refrescos y bebidas saborizadas: $1.6451 pesos por litro.
CONTEXTO DEL IEPS
La última actualización de estas cuotas se realizó el 22 de diciembre de 2023. Este tipo de ajustes busca mantener el poder adquisitivo del impuesto frente a la inflación, pero también genera debate debido al impacto económico que representa para los consumidores y las industrias afectadas.
REACCIONES Y PERSPECTIVAS
Los incrementos en el IEPS suelen ser una medida controvertida, ya que tienen un impacto directo en el bolsillo de los ciudadanos. Sin embargo, el gobierno justifica estos ajustes como una estrategia para recaudar recursos destinados a proyectos prioritarios y desincentivar el consumo de productos que afectan la salud, como el tabaco y las bebidas azucaradas.
Con estas medidas, las autoridades esperan reforzar los ingresos fiscales, pero también podrían enfrentar críticas por parte de sectores industriales y organizaciones ciudadanas preocupadas por el efecto inflacionario que estas cuotas podrían tener en la economía nacional.