Chicapa de Castro, Juchitán, Oaxaca, se enorgullece de tener un hijo predilecto representativo a nivel mundial, Tomás Pineda. Él inició sus primeros estudios en su tierra natal y con el paso del tiempo, y dada su inquietud personal, salió de donde está su ombligo con destino a esta capital oaxaqueña para superarse en el arte, que siempre le atrajo desde su infancia, y así fue como llegó a la Universidad Mesoamericana, en donde se graduó como licenciado en Diseño Gráfico.
Tomás continuó tomando un curso de grabado en la Fundacione II Bisonte per lo Studio dell arte en Florencia, Italia; realizó su residencia artística en Lafayette College, en Pensylvania, Estados Unidos; tomó un curso de cerámica con el maestro Onel Borges en Guantánamo, Cuba; un curso de Litografía sobre mármol mexicano con el maestro Per Anderson, en el Taller de Artes Plásticas “Rufino Tamayo” en esta ciudad; hizo un curso de litografía en La Habana, Cuba; un diplomado de Identidad Corporativa en la Universidad Mesoamericana, Oaxaca, México; un curso avanzado de Técnicas de Pintura con el maestro Luis Nishizawa, en Guanajuato, México; un curso de Grabado a colores, con el maestro Charles Barth, en Oaxaca; un curso de Monotipia y collografía, con la maestra Karina Muyaes, en Oaxaca; un curso de Diseño gráfico con el maestro Antonio Pérez “Nico”, en Oaxaca; un curso de Gráfica con el maestro Sinzaburo Takeda, en Oaxaca; un curso de grabado sobre metal con el maestro Juan Alcázar, en Oaxaca. También ingresó al Taller de Artes Plásticas del Instituto Tecnológico del Istmo, en Juchitán de Zaragoza, Oaxaca.
Cuenta con 23 exposiciones colectivas, en lugares como: en Santa Ana California, Estados Unidos; en Wisconsin, Estados Unidos; en Italia; en Chicago, Illinois, Estados Unidos.
En nuestro país ha expuesto en Veracruz; en el IAGO, Oaxaca; en el vestíbulo del foro polivalente, Antonieta Rivas Mercado; en la Biblioteca México; en el Museo de los Pintores en esta ciudad; en la Universidad del Istmo, en Ciudad Ixtepec, Oaxaca; en Casa de la Cultura de Juchitán, Oaxaca; en la Galería Nou de Puebla; en Monterrey, Nuevo León y en la ciudad de Tlaxcala, México.
Ha tenido exposiciones individuales en Yucatán; en San Cristóbal de las Casas, Chiapas; en Barcelona, España; en San Miguel de Allende, Guanajuato; en Tepoztlán, Morelos; en la Isla de Cozumel; en Salina Cruz, Oaxaca; en Puerto Vallarta, Jalisco; en Fukuoka, Japón; en Nueva York, Estados Unidos; en Osaka, Japón y en varios lugares de esta capital oaxaqueña con las que suman 39 exposiciones individuales.
Creatividad
Tomás Pineda pinta lo que ve y anhela con júbilo, ha prendido a tomar sus pinceles para aplicar el color con más efusividad. Sus trazos son el resultado del aprendizaje constante en el oficio del arte, el dibujo es su prioridad y como tal las líneas le impresionan porque es el recurso de la gestualidad, lo espontáneo y lo que su corazón dicta cuando esta frente al lienzo día a día.
Sus colecciones han estado en el Museo de Arte Contemporáneo en Punta del Este, Uruguay; en la Pinacoteca del Honorable Ayuntamiento de Juchitán, Oaxaca; en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y en la Universidad Nacional Autónoma de México, en México y en el Instituto de Artes Gráficas (IAGO) Oaxaca.
Crítica
La obra de Tomás Pineda es realmente maravillosa, la más bella por los motivos que plasma, cuyo contenido es fácil de entender por su excelente imaginación que va más allá de los múltiples trabajos que a la fecha he visto, considero que Tomás Pineda es el mejor pintor oaxaqueño después de Toledo y demás sobresalientes.
Pienso que debe reconocerse su gran talento artístico, el cual es bellísimo como ningún otro trabajo. Me atrevo a pedir a la Secretaría de las Culturas y las Artes un reconocimiento para este genial artista orgullosamente oaxaqueño.
Con información de Dolores Jiménez
