Jorge Ramos con la cola entre las patas

Jorge Ramos que dice ser periodista, vive en EE UU, trabaja para Univisión, canal de TV estadounidense, se dedica a criticar a políticos de otros países, pero nunca critica a los políticos de EEUU que promueven guerras para robar los recursos naturales de otros países.
Este tipo, camina de frentazo en frentazo. Donald Trump lo saca a empujones de una rueda de prensa; Nicolás Maduro lo corre de Venezuela y Andrés Manuel López lo pone en su sitio y además le dice “qué bueno que viniste”.
Jorge comprobó que en México si hay libertad de expresión y de preguntar todo lo que los periodistas quieran, lo que no sucede ni en EE UU y Venezuela. Pero además AMLO sin perder tempo explicó a Jorge Ramos con plátanos y aguacates lo que no dejaba satisfecho al fifí transnacional. Luego, el reportero conservador se quedó sin preguntas ni mayores impertinencias. Insisto el exhibicionismo de Jorge, demostró que en México la libertad de opinar y de preguntar no se limita en ninguna forma.
Otros reporteros fifí, que no vale la pena recordar sus nombres, ya intentaron hacer quedar mal al presidente AMLO. Pero todos han fracasado porque no se quedaron sin respuesta, ni recibieron discriminaciones.
No es un secreto que todos los periodistas fifí, están que truenan contra las conferencias mañaneras del presidente. No soportan que ya se acabaron las entrevistas “exclusivas” tan personales como arregladitas y elaboradas a la medida del entrevistador y los entrevistados.
Hoy, gracias a la apertura a la “4T” ya no hay periodistas de primera ni de segunda, todos tienen el mismo trato y respeto. Así es la democracia participativa. ¿Están oyendo fifís?
Mujer inspira confianza en la Guardia Nacional
Patricia Rosalinda Trujillo Mariel, nació el 20 de Diciembre de 1964 en Veracruz. El presidente Andrés Manuel López Obrador la nombró comisaria general de la Policía Federal como integrante de la Coordinación Operativa Institucional de la Guardia Nacional.
Es interesante observar como la ciencia y la ética se combinan en la persona de Patricia Trujillo. Por su experiencia y conocimientos les ganó las primeras planas a los militares en los medios de comunicación al conocerse la Guardia Nacional.
No es para menos; porque los altos mandos militares y mandos de policías federales eran designados en primer lugar, por amigos y compadres de los mafiosos del poder. En los estados sucede el mismo compadrazgo al designar a los jefes de policía y a los procuradores de justicia. Los mexicanos esperamos que esto ya no suceda en los estados.
En calidad de Comisaria Nacional, Patricia Trujillo, con toda seguridad tendrá bajo la lupa a todos los directores de policía y de seguridad en los estados y municipios. Esa mirada vigilante inspira confianza en la Guardia Nacional que estamos estrenando.
La sociedad espera que Patricia Trujillo sepa escuchar a la gente para atender directamente a las personas víctimas de tanto de los delincuentes, como de otras autoridades acostumbradas al despotismo tradicional del neoliberalismo.
Por supuesto, como comisaria también tendrá acceso a los expedientes de los militares que violen los derechos humanos o hagan omisiones en perjuicio de la sociedad.
Ahora corresponde a la sociedad toda permanecer vigilante y denunciante ante la comisionada más preparada que hemos conocida, y que esperamos haga su trabajo con probidad y de absoluto respeto a las leyes.
AVISO OBLIGADO: quien escribe esta columna, no autoriza a ninguna “organización de periodistas” a pedir en mi nombre, apoyos para festejos a periodistas, tampoco para aniversarios de revistas, ni para cumpleaños, carnes asadas, celebraciones de cuates, congresos de reporteros y proyectos culturales y deportivos…
Ni para otras ocurrencias como cubrir necesidades relacionadas con familiares enfermos, entierros y otros pretextos. ¡Denuncie a las organizaciones de periodistas pedigüeñas! Esto es importante. Y ¡Hay que decirlo!
“Nunca subestimen el poder de la palabra escrita”
Es mi opinión. Y nada más…
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