Dos árboles emblemáticos, uno de México y otro de Holanda; dos escenarios culturales: el centro de Oaxaca y un molino en la tierra de Vincent van Gogh. Así se contraponen las dos raíces de Pablo Esteban, artista nacido en un continente y cuya vida ha transcurrido en dos: América y Europa.
Esas dos raíces, que se dan por tener un padre de Oaxaca y una madre de Holanda, lo han puesto en medio de dos países que observa desde “un punto más imparcial” y así desmembrar las diferencias culturales que ahora plasma en sus obras.
Cargados de color, de texturas y formas, los cuadros y esculturas de Pablo Esteban proponen un diálogo entre dos culturas. Por medio de contrastes, también reflexiona sobre la vida y la muerte y el orden y el caos.
A él, que le gustan las flores marchitas porque están en decadencia, porque significan la vida y la muerte, ve lo poético en lo cotidiano, como los bodegones que se observan en los cuadros de Vincent van Gogh.
Y es que -añade- la naturaleza tiene un lenguaje que se repite en el cuerpo humano, donde las ramas y raíces de un árbol son como las venas y arterias de una persona.
Este 15 de julio, Pablo Esteban inaugura la exposición Dos países, dos raíces, en la galería Vagamundo (ubicada en el Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca). Con más de una treintena de obras, recrea varios momentos de su vida, de su desarrollo en la plástica, de los paisajes y personas de Oaxaca y de Holanda.
Pablo Esteban dice que cada artista se retrata a través de sus obras y en su caso ha llevado ello a cada cuadro, en donde lo mismo plasma sus recuerdos, la nostalgia por estar en un sitio, a sus padres y su sentir en situaciones varias.
Asimismo, que el arte -al ser libertad- se puede utilizar para protestas, para enfocar la belleza de algo, para dar comentarios u opiniones, o simplemente para mostrar una visión. En su caso, refiere que el hacer tulipanes u otros elementos es a través de un estilo propio y que la crítica se percibe en piezas como una en la que aborda a las personas que piden ayuda monetaria en las calles.
En otros momentos, el arte es también para establecer sus raíces, como lo ha hecho con un busto de Van Gogh, que viene como homenaje a una de las figuras que le ha inspirado.
Miguel Vives, curador de la exposición, explica que la inauguración de este 15 de julio trata de una recopilación de obra reciente y actual.
“Es una obra que tiene mucha influencia europea, al igual que la obra de Alejandro Santiago tiene mucha influencia del grupo CoBrA; una muy fuerte en la que se puede ver una obra matérica en muchos de los casos, en que los emplastes de pintura que son de un grosor muy importante y que tiene mucha textura”, comenta.
