Un adulto mayor se debate entre la vida y la muerte en el Hospital General de Tehuantepec, al sufrir traumatismo craneoencefálico tras una caída mientras podaba un árbol. Quienes lo contrataron brillan por su ausencia y no se han hecho cargo de los gastos médicos.
El martes 14 de marzo, Don Juan fue contratado de palabra para podar un árbol y ganarse unos centavos para unas caguamas; los hechos se registraron en el interior de las nuevas instalaciones de la Ford que se ubican frente a la gasolinera Gastegar.
Don Juan aceptó y comenzó el trabajo, pero al momento de realizar un movimiento en falso, perdió el equilibrio, resbaló de la escalera y cayó de forma abrupta de aproximadamente tres metros de altura, cayó pesadamente de cabeza y quedando malherido en el suelo.
Al lugar arribaron paramédicos de la Cruz Roja Mexicana, quienes lo atendieron y lo trasladaron a diferentes hospitales, sin que pudiera recibir atención médica, debido que no contaba con algún familiar que se hiciera responsable.
Minutos después logró ingresar al Hospital General de Tehuantepec, en donde quedó internado. Posteriormente, sus familiares al enterarse de la situación acudieron al lugar.
Asimismo, fueron informados que debido a la gravedad de sus lesiones se le necesitaban realizar algunos estudios, pero nada pudieron hacer ante la falta de recursos económicos.
Es por eso que exigen a las autoridades tomen cartas en el asunto y quienes lo contrataron se hagan responsables y le ayuden con los gatos médicos, ya que se debate entre la vida y la muerte.