Desde la semana pasada se han registrado en Los Ángeles, California, Estados Unidos, disturbios muy graves debido a la migración extranjera y su expulsión por las autoridades de aquel país.
Aquella ciudad llamada santuario está experimentando incluso el toque de queda de las 20:00 horas a las 6:00 de la mañana del día siguiente, lo que significa desde disturbios y graves protestas de emigrantes extranjeros sobre todo de origen mexicano.
Este conflicto no tiene para cuándo terminar al grado que los gobiernos han hecho intervenir a la Guardia Nacional, al ejército y a la policía de Los Ángeles, sobre todo en el Este de aquel estado en donde el 99% de los habitantes son mexicanos.
La respuesta del gobierno mexicano no parece enérgica al nivel necesario.
En ese orden de ideas, se pueden presentar tragedias graves que desde luego no tenemos.
Yo también soy Pueblo.
Por allí nos encontraremos.