El uso del espacio público se ha convertido ya en una minita de oro para múltiples comunidades; sin ofrecer algún servicio, apoyo, orientación al visitante a cambio; amparados en “decisiones de la comunidad” o por los “usos y costumbres”.
Diversos poblados de Oaxaca han hecho una práctica común el cobrar “una cuota” por el simple hecho de transitar por la zona.
El fin de semana, ciclistas que han sido visitantes habituales al paraje de Arroyo Guacamaya, situado a 36 kilómetros de la ciudad de Oaxaca, dieron cuenta que la comunidad de San Gabriel Etla, apenas al inicio del ascenso al reto montañoso, comenzaron a cobrar una cuota de ¡200 pesos por persona! por el simple hecho de transitar por el poblado, con lo que acudir a ese lugar se convierte en un paseo de lujo.
Y “si no les gusta no vengan”, argumentan habitantes de San Miguel, amparado por una decisión comunitaria y bajo el argumento de que se rigen por usos y costumbres.
“La pregunta es ¿Les parece justo pagar 200 pesos por persona solo por atravesar un camino? Pues esto es lo que nos encontramos el día de ayer domingo 30 de marzo 2025 en la comunidad de San Gabriel Etla”, indicaron deportistas que tienen al Valle de Etla, la subida a Marcos Pérez y otros puntos montañosos como referentes y retos para ejercitarse.
Los deportistas abundan que están colocadas “Unas cartulinas amarillas con la leyenda de una cuota de 200 pesos por persona para poder atravesar su comunidad y llegar a la comunidad de las Guacamayas”.
El “puesto de cobro”, señalan las cartulinas improvisadas, se sitúa en el paraje Tanques de Agua. San Gabriel Etla está a 32 kilómetros de la capital y en el lado opuesto de la Villa de Etla en la carretera 190. El lugar carece de algún punto de orientación, apoyo al visitante, algún paraje o lugar de atracción excepto su pequeño templo y, no dudarlo, un tránsito apacible y fresco. Pero nada más.
Un biker habitual abunda “todos los que hemos visitado las Guacamayas, en este caso, nosotros como ciclistas que durante más de 20 años hemos visitado las Guacamayas, sabemos que ahí cobran 20 pesos por entrar a su cascada, y obviamente, si queremos disfrutar de los servicios que ofrecen, como restaurante, cabañas, guías, etcétera, tienen sus costos, eso no es el problema, porque son precios justos”.
Sin duda, la comunidad enclavada en el municipio de Marcos Pérez, ha trabajado por mantener sus espacios naturales como atractivo, más aún, fuertes lluvias causaron hace años severas afectaciones en los estanques de cultivo de trucha, en la zona de la cascada y accesos a la comunidad, de lo cual se han ido recuperando.
“Aquí lo que nos sorprendió el día de ayer es el cobro de 200 pesos por ciclista de las personas de San Gabriel Etla para atravesar su camino y llegar a las Guacamayas, lo cual era nuestra intención, como lo hemos realizado durante tantos años”, muchos de los habituales ciclistas desistieron en el propósito de “retar” a la subida montañosa y debieron retornar o retomar otro camino para hacer deporte y evitar pagar la cuota que, según argumenta San Gabriel Etla, sería invertida en mejorar el lugar.
El usuario Francisco Grandos, también ciclista habitual señala la amarga experiencia “tomamos la decisión de grupo de intentar negociar, pero lamentablemente no se llegó a un acuerdo. Conocemos la importancia de apoyar a las comunidades locales y hemos visitado diversas reservas ecológicas y pueblos a lo largo del año, donde los costos varían entre 20 y 50 pesos por persona solo para entrar. Muchas comunidades ofrecen otros servicios adicionales como cabañas, baños y restaurantes a precios razonables, esto ya es extra y varían los precios, pero no tenemos ninguna queja, todos son precios justos. Por ejemplo, si rentas una cabaña para 2 personas, posiblemente pagas 300 pesos por persona y me parece un precio justo.
Sin embargo, en este caso, el costo solicitado de 200 pesos por la comunidad de San Gabriel Etla solo por atravesar su comunidad parecía excesivo. Optamos por explorar otras opciones y el destino nos llevó a otro lugar no planeado verdaderamente increíble”.