La epidemia por el coronavirus y el cierre de las fronteras y mercados internacionales tiene a productores al borde de la pérdida de la producción anual en varias regiones del estado.
Raúl Narváez Labastida, presidente del Sistema Producto en Oaxaca, afirmó que los productos más golpeados en estos momentos de aislamiento social y reducción de actividades en Centrales de Abasto, son: limón mexicano, papaya y mango.
Sin embargo, a eso se suma -dijo- el déficit de maíz para este año que podría alcanzar fácilmente las 400 mil toneladas que tendremos que comprar a otros estados, debido a la baja producción en la entidad derivada de las duras sequías y heladas que pegaron en los Valles y Mixteca.
“Hasta el momento no hemos alcanzado acuerdo comercial para traer el grano, dado que la reducción de movilidad y especulaciones han retrasado algo firme con Sinaloa y se está buscando con Chiapas”, externó.
Solo en caso de un toque de queda nacional estaría complicando el panorama porque entonces sí, ni por tierra podría llegar el maíz al estado, no obstante también estamos viendo con una empresa naviera y se pueda trasladar a Salina Cruz, reveló.
Añadió que los productores del básico en el estado han reducido su producción a la mitad, debido a la falta de certidumbre y sobre todo de dinero para comprar los insumos.
“Los tomateros se están quejando porque no hay mercado para ellos, aún y con que no se está cerrando la Central de Abasto o los mercados locales (Ocotlán, Tlacolula, Zaachila), el producto no se mueve”, anotó.
De igual manera expuso que el mensaje gubernamental “de preserva tu vida, ya no tu economía”, es un duro golpe para los pequeños productores, porque entonces, ¿de qué vamos a vivir?”.
Narváez Labastida explicó que si no se cuida el sector del campo entonces podría hacer crisis y tener falta de autosuficiencia alimentaria y entonces la batalla no va a ser por conseguir los cubrebocas, sino por conseguir la comida.
“Tan solo en Tututepec en la Costa de Oaxaca, se están quedando cientos de toneladas de productos por falta de mercado, no está llegando a todos lados por la falta de mercado”, explicó.
Mencionó que están sanitizando todo para empacar limón mexicano y de alta demanda nacional y local, pero hay muchas restricciones para moverlo y eso afecta a los productores estatales.
Otros productos que están siendo afectados severamente por el Covid-19 es el mango en la región del Istmo de Tehuantepec, en donde observamos que están tirados a orilla de carretera.
“Eso no es justo: ni para el productor, ni para la gente porque es alimento, pero los mercados de exportación básicamente en los Estados Unidos se cerró y no hay fecha de comercialización, pero confiamos en que sea pronto”, enfatizó.
Los mangueros están desesperados porque se está echando a perder la producción, por eso que están buscando el mercado de Canadá, dado que Estados Unidos sigue cerrado, reiteró.
“No hay mercado, no hay condiciones de comercialización, tenemos riesgo de perder producción y con tristeza podemos dar por perdido el año, solo nos queremos quedar vigentes, pero ganancias ya no se van a sacar”, lanzó.
CENTRAL DE ABASTO, NO SE CIERRA
José Luis Díaz Cabrera, representante de la zona húmeda del Mercado de Abasto, rechazó cualquier cierre de la zona comercial más importante de la capital y de los Valles Centrales.
“Creo que hay un malentendido, no acordamos cerrar, solamente vamos a reducir el horario de venta, así como fortalecer las medidas preventivas para evitar los contagios de Coronavirus”, sostuvo.
El comerciante mencionó que las ventas no han disminuido en el mercado, al contrario, se han mantenido e incluso en algunos ramos se incrementaron dado el largo periodo de cuarentena.
“El quedarse en casa implica mayor consumo de alimentos y fruta y esos son los productos que se están moviendo más, contrario a productos como ropa y zapatos, comercios que se vieron obligados a cerrar”, añadió.
Descartó que existan grande volúmenes de producto guardado en las bodegas por falta de ventas, se redujo la movilidad de personas a raíz de la contingencia pero la gente sigue comprando la misma cantidad o un poco más.
Expuso que la autoridad municipal y estatal colocará los filtros sanitarios a partir de la próxima semana, básicamente para valorar a las personas que presenten algunos síntomas y se eviten los contagios masivos.
“No es cierre del Mercado de Abasto, se trata de redoblar medidas como la sana distancia, el uso de cubrebocas para clientes y comerciantes, además de distribución de gel antibacterial o agua con cloro”, subrayó.
Díaz Cabrera anotó que sí se requieren aterrizan los apoyos como microcréditos para respaldar a los negocios y flexibilizarlos, “no pedimos que nos regalen nada pero sí con intereses bajos y seguir conservando empleos”.
“Algo que tenemos aquí en el Mercado de Abasto es que todos somos una familia, donde come uno comen dos y así, por eso no podemos despedir a nuestra gente, aquí le entramos todos a la chinga y sacamos para la comida de todos, no es momento de darnos la espalda”, cerró.