Cuando empezó en el mundo de la orfebrería, el kilo de oro costaba 12 mil pesos “de aquellos” y el de plata costaba 500 pesos. El precio de los metales preciosos, dice Ramón Valdez Sandoval, siempre ha incrementado porque es cuestión de economía mundial: “de eso se fortalecen los países y el metal no puede bajar”.
Ramón Valdez Sandoval tiene más de 60 años en el arte de la orfebrería y en el negocio joyero y considera que con el reciente incremento histórico en el precio del oro seguirá bajando la demanda de joyería con este metal precioso.
De acuerdo con la agencia de noticias AFP, este viernes la onza (28.35 gramos) de oro superó los 3 mil dólares y “por primera vez en la historia, impulsado por su condición de valor seguro frente a las preocupaciones geopolíticas y la guerra comercial iniciada por Estados Unidos de Donald Trump”.
Esto implica que cada gramo cuesta casi 106 dólares o alrededor de 2 mil 100 pesos según el valor del dólar de este viernes.
Pero el precio del oro, aclara Ramón, no es el único factor para que disminuya su demanda, pues la inseguridad también ha jugado un papel importante para que las personas opten por dejar de usar prendas de oro y, por ende, de la compra de estas. En su lugar, han recurrido al oro laminado o la plata, que no era valorada hace unos años.
“La gente ya no puede lucir aretes o cadenas porque los asaltan”, cuenta desde la joyería Florencia, en el mercado Benito Juárez de la ciudad de Oaxaca.
Sin embargo, señala que las prendas de oro seguirán siendo buscadas únicamente para ocasiones especiales como las graduaciones, las bodas, los bautizos y otras celebraciones.
El propietario de la joyería Florencia cuenta que inició en el arte de la joyería cuando tenía 9 años de edad y a sus 72 sigue en el negocio.