Para la señora Alejandrina García Velasco, el 8 de Marzo (Día Internacional de la Mujer) será un día de jornal más en la ladrillera en donde labora de 7 de la mañana hasta que cae la tarde.
Y es que cada 8 de Marzo se conmemora la lucha de las mujeres por la igualdad, el reconocimiento y ejercicio efectivo de sus derechos, el cual se hizo oficial en 1975 por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) .
No obstante, en Oaxaca la realidad es distinta para algunas personas.
Un ejemplo de ello es Alejandrina, quien aún y con el doble o tiple esfuerzo físico que significa dar alimento, cobijo y demás a sus nietos, no ha dejado de hacerlo desde que tomó esa responsabilidad.
Ataviada de ropa de trabajo y sombrero, la mujer de 52 años relata lo complicado que es remar contracorriente para mantener a dos de sus menores nietos.
Y es que tras la muerte del papá de los niños, ella asumió la tutela de dos niñas, quienes día con día la acompañan en su jornada laboral.
Debajo de una improvisada sombra, la menor de un año espera a que su abuela tome un descanso para poder darle agua y comida, ya que después de las 14:00 horas toma un breve descanso.
Sobre su trabajo diario, explica el proceso que debe seguir con el barro para tener la preparación óptima y tener un mejor material, ya que de eso también depende una buena venta de ladrillo rojo.
La menor de 7 meses de edad aguarda bajo la sombra de una sombrilla desgastada por el intenso sol, en tanto la segunda nieta de dos años y 3 meses juega con el barro y ayuda a uno de sus tíos.
Debido al intenso calor que el pasado martes azotó la ciudad y los Valles Centrales la jornada laboral fue más dura y eso también lo resintió su menor nieta, quien por ratos despertaba para tener un poco de agua.
Aquí estoy al pendiente de ellos, no hay otro espacio en donde estén mejor, me acompañan y acá nos reunimos mi hijo con su familia, probamos alimentos y le damos al trabajo”, indica.
Y es que por cada jornal diario la señora puede obtener hasta 150 pesos y que a la semana se vuelven 700 pesos con los cuales se mantiene ella y sus dos nietas.
García Velasco confía en obtener algún tipo de ayuda gubernamental, pero en lo que eso ocurre elabora sus ladrillos para poder salir adelante.
Al platicar con nuestro compañero reportero Carlos Hernández, la mujer de 52 años explicó las dificultades que pasa en su trabajo, puesto que además de trabajar, cuida a su pequeña nieta mientras elabora materiales para la construcción pic.twitter.com/A2pZ514p8a
— El Imparcial de Oaxaca (@ImparcialOaxaca) March 5, 2024