Con retos para impulsar las ventas en medio de un contexto de poca promoción y en el que también impera el comercio informal de textiles industriales que copian a los tradicionales o que son de otros orígenes, el Mercado José Perfecto García, de la ciudad de Oaxaca, cumplió este sábado 45 años de su fundación.
Una celebración religiosa y una convivencia entre las familias artesanas fueron parte de los festejos en este lugar que administra el ayuntamiento de Oaxaca de Juárez y que es parte de los 14 mercados públicos municipales (aparte del Mercado de Abasto).
Cintia Santiago, presidenta de la mesa directiva del mercado José Perfecto García, más conocido como mercado de Artesanías, cuenta que llegar a estos 45 años implica muchas necesidades, además de hacer frente a la falta de apoyos gubernamentales o complicaciones en materia fiscal ante la Federación.
“Uno de los mayores retos siempre ha sido dar a conocer más el mercado, ya que es uno de los más olvidados, a pesar de estar céntricos”, explica Cintia, quien además señala que los vendedores ambulantes acaparan a los clientes en las calles más cercanas al zócalo y de la Alameda de León y varios se hacen pasar artesanos cuando no lo son y ofrecen prendas que no son artesanías sino “cosas chinas”.
En este mercado hay 133 locatarios de diversas regiones del estado, con igual número de familias que dependen de la venta de artesanías. Sin embargo, también enfrentan el regateo, una práctica con la que los potenciales clientes piden un descuento. Quienes recurren más a esta práctica son los visitantes extranjeros, dice la representante. En tanto, observando que el público local o nacional valora más las creaciones artesanales.
A estos retos se suman las trabas ante el Servicio de Administración Tributaria, pues aunque tienen que declarar no siempre es fácil por la naturaleza misma de las artesanos, ya que se hacen con recursos naturales como el barro que se obtiene en las mismas comunidades o porque es complicado emitir facturas con la venta de artesanías.
Aún así, tratan de estar a la vanguardia para impulsar sus ventas, a través del cobro en efectivo, pago con tarjeta y otros métodos.
El mercado abrió sus puertas el 1 de febrero de 1980 y en los últimos años, según se muestra en una placa de sus muros, tuvo que ser intervenido en su sistema de alumbrado interior. Para esto, la anterior administración reportó una inversión de 399 mil 33 pesos de recursos federales (del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Sociales, FAIS, del año 2024).