Con una emotiva misa, y ante Dios como testigo, Johana Jacobson y Joshe Bravo unieron sus vidas en sagrado matrimonio en el Templo de Santo Domingo de Guzmán, luego de dos maravillosos años de noviazgo.
Ella, originaria de la Ciudad de México; él, originario de Oaxaca, tuvieron la fortuna de encontrarse en este camino llamado vida, y ahora, con amor, voluntad y paciencia, han decidido formar su propia familia.
Este acto de amor fue presenciado por los familiares de los novios, sus padrinos y sus amigos más cercanos, quienes dieron fe del gran amor y respeto que se profesan Johana y Joshe.

Derecha: Con la mamá y la hermana de la novia.
Luego de la ceremonia religiosa los novios se tomaron hermosas y divertidas fotografías con sus invitados, y después dio inicio una tradicional calenda con chinas oaxaqueñas, tiliches, monos de calenda, danzantes de la pluma, entre otros, para recorrer las principales calles del Centro Histórico.
Posteriormente, la pareja y sus invitados se trasladaron al municipio de Santa María El Tule, donde se llevó a cabo la recepción. El lugar lució impecable, el menú estuvo exquisito y el ambiente inmejorable, pues todos disfrutaron de la música y baile para celebrar el triunfo del amor entre Johana y Joshe.

La celebración se alargó hasta altas horas de la noche, ya que los invitados se encontraban muy a gusto en compañía de los novios, quienes no dudaron en compartir este bello acontecimiento con los que más quieren.
Desde este espacio deseamos que Johana y Joshe trabajen con amor, paciencia, respeto y comunicación su matrimonio, pues son los pilares que sostienen una relación.
¡Muchas felicidades en este nuevo paso y que Dios les dé la sabiduría para salir siempre avantes ante cualquier conflicto!