En un esfuerzo por simplificar su régimen fiscal y fortalecer sus operaciones, Petróleos Mexicanos (Pemex) adoptará un nuevo esquema que consistirá en el pago de un único impuesto denominado Derecho Petrolero para el Bienestar, el cual reemplazará los tres impuestos que anteriormente pagaba la empresa. Este anuncio fue realizado por la Presidenta de la República, Claudia Sheinbaum, y la Secretaria de Energía, Luz Elena González, durante la conferencia matutina conocida como “La Mañanera del Pueblo”.
¿EN QUÉ CONSISTE EL NUEVO RÉGIMEN FISCAL?
El Derecho Petrolero para el Bienestar representará un 30% de la producción de hidrocarburos de Pemex, lo que anteriormente podía significar hasta un 70% de los ingresos de la empresa, una carga fiscal considerable. Además, se aplicará un 11.63% sobre la producción de gas no asociado. El objetivo de este cambio es simplificar la estructura tributaria, lo que permitirá a Pemex retener una mayor parte de sus ingresos para financiar sus operaciones internas.
Este nuevo sistema también se enmarca dentro de los principios de la austeridad republicana y la doctrina de la 4T (Cuarta Transformación), que busca reducir los costos fiscales que enfrentaba la empresa productiva del Estado.
IMPUESTOS ELIMINADOS
Anteriormente, Pemex estaba obligada a pagar varios impuestos adicionales al que ahora se simplificará en el Derecho Petrolero para el Bienestar. Estos impuestos eran:
- Impuesto por exploración.
- Impuesto por extracción.
- Impuesto por utilidad compartida.
La simplificación de estos gravámenes busca fortalecer la capacidad operativa de Pemex, favoreciendo su estabilidad financiera y reduciendo las cargas fiscales innecesarias.
EJES DEL NUEVO PLAN ENERGÉTICO PARA PEMEX
El nuevo régimen fiscal va de la mano con el planteamiento de un nuevo modelo energético para el país, que se enfocará en:
Priorizar el consumo nacional en la producción de petróleo, evitando que se destine una cantidad excesiva a la exportación.
Mantener una relación reservas/producción de hidrocarburos de al menos 10 años.
Aumentar la producción nacional de petroquímicos, con el fin de suministrar insumos a la industria nacional y fertilizantes para el campo.
Mantener el control de precios máximos en el gas LP, y congelar los precios de la gasolina y el diésel en términos reales.
Limitar el incremento de tarifas de transporte y distribución de gas natural, que no deben aumentar más allá de la inflación.
EL IMPACTO DEL NUEVO RÉGIMEN FISCAL EN PEMEX Y SU DEUDA
Édgar Amador, subsecretario de Hacienda, destacó en la misma conferencia que Pemex mantiene un adeudo cercano a los 100 mil millones de dólares, pero que se están tomando medidas para evitar retrasos en el cumplimiento de sus obligaciones fiscales y financieras.
Este nuevo régimen fiscal será parte de la estrategia integral del gobierno para optimizar los recursos del Estado y asegurar que Pemex tenga la capacidad de operar de manera eficiente, con una carga fiscal que se ajuste mejor a sus necesidades y circunstancias.
RELACIÓN CON EL PRESUPUESTO DE EGRESOS DE LA FEDERACIÓN 2025
Este cambio en el régimen fiscal de Pemex se presenta en el marco de la elaboración del Presupuesto de Egresos de la Federación 2025 (PEF), que se prevé tenga un monto total de 9 billones de pesos. Dentro de este presupuesto, se contempla una partida específica para Pemex, cuyo destino será presentado ante el pleno de la Cámara de Diputados el próximo 15 de noviembre de 2024 y también se dará a conocer en la Mañanera del Pueblo.
Este anuncio refleja el compromiso del gobierno mexicano con una gestión eficiente de los recursos del país, además de una estrategia fiscal más ágil para Pemex, que permitirá fortalecer sus operaciones, optimizar sus recursos y garantizar la seguridad energética de México.