Comenzada la semana mayor, Teotitlán del Valle empezó la semana con una procesión que duró todo el día en calles de la población, recorrió las cinco secciones que componen esta hermosa comunidad de los Valles Centrales ubicada a 40 minutos del centro de la ciudad de Oaxaca.
Desde el fin de semana comenzaron las celebraciones de la Semana Santa con la bendición de las palmas por el Domingo de Ramos, la población acudió a la explanada principal, afuera de la iglesia, donde se acondicionó el espacio debido a una gran asistencia de la población que se ha sumado por primera vez con mucho entusiasmo como hace mucho tiempo no pasaba.
Este lunes, la procesión llevó las imágenes históricas de Jesús y la virgen de la Soledad y en cada esquina los familiares del comité de la iglesia prepararon refrigerios para todos los que acompañaron este caminar. Las autoridades de la iglesia tienen como costumbre agradecer por los platillos y bebidas que ofrecen al pueblo a su llegada, antes de servir los alimentos, ya que esa es una manera de estar en hermandad compartiendo el pan y la sal en la mesa.
Los doce apóstoles representados por hombres que son originarios de la comunidad acompañan en todo momento las imágenes que son adornadas por flores y las mujeres besan las vestimentas de las sagradas imágenes para luego recibir una flor como símbolo de agradecimiento, la cual ha sido bendecida, los hombres repiten lo mismo y también reciben el presente.
El centurión principal fue representado por un niño de siete años quien también fue acompañado por centuriones de la misma edad, quienes representan a la autoridad a la que, según el pasaje bíblico, fue entregado Jesús para golpearlo hasta llegar a su crucifixión.
En Teotitlán del Valle estos días sagrados son símbolo de hermandad y tal como lo menciona el secretario del comité de la iglesia, Antonio Ruiz: ” Estas son las verdaderas tradiciones y costumbres de la comunidad, en cada sección se hace un convivio que demuestra la hermandad y la paz que ahora se vive en Teotitlán, algo que no había ocurrido antes y por eso todo el comité trabaja con mucha emoción y fervor para mantener al pueblo unido y continúe siendo ejemplo de organización.”
Las cocineras tradicionales juegan un papel muy importante, ya que son ellas quienes sirven los tamales, tacos y la comida que ofrecen en las esquinas. Todo mundo recibe un plato, agua o nieve, no importa si son visitantes o vecinos que pasen por el lugar, nadie se queda sin probar lo que se prepara desde sus cocinas, es mágico ver a todas ellas cocinando y repartiendo los alimentos. No hay nada que se le parezca y Oaxaca tiene esa particularidad, eso se refleja en las calles coloridas y tradicionales. Un Pueblo unido que busca siempre ser ejemplo de hermandad y amor por sus tradiciones.
Teotitlán se prepara para los siguientes eventos del lavatorio de pies, el encarcelamiento de Jesús, donde las autoridades de la iglesia acompañan a velar toda la noche previa a su crucifixión y a la misa de las siete palabras. Los habitantes esperan que celebren con ellos el significado de estos días importantes y continuar el ejemplo que nos dejó Jesús, hacer el bien y continuar con su ejemplo con la unificación de los pueblos.