Artista tlaxiaqueño promueve raíz indígena
Su trabajo es apreciado por las personas: “esto no es tan común verlo en una escultura o en alguna obra de arte”
Carlos Aranda González, maestro artesano e impulsor de los conocimientos tradicionales y de la cultura originaria de la Mixteca, compartió que desde hace 15 años promueve el estudio de la historia, la cultura y tradiciones antiguas, impulsando las técnicas de elaboración del arco, así como elaborando representaciones de la identidad de los pueblos en barro.
Resaltó que es el momento de retomar, “no me gusta usar el término rescate, se están retomando los conocimientos antiguos; por ello hice hace tiempo una obra que se llama el resurgimiento que evoca a un personaje indígena que está saliendo de la tierra dándole realce a nuestra raíz indígena”.
Dijo que parte de su raíz indígena proviene de Magdalena Peñasco, distrito de Tlaxiaco, “me gusta trabajar con la identidad porque al ver mi trabajo las personas sólo con verlo tienen que identificar que estamos impulsando la cultura mixteca y la de nuestros antepasados”.
En este contexto, dijo que su trabajo es apreciado por las personas al no ser tan común, “esto no es tan común verlo en una escultura o en alguna obra de arte; me han invitado a dar algunos talleres en escuelas, con jóvenes a quienes se les comparte el proyecto, con la finalidad de preservar el trabajo en barro, así como los conocimientos que fundamentan esta actividad”.
Lamentó que, derivado del masivo uso de la tecnología, las personas ya no piensan tanto en trabajar el barro, el telar; en cambio se usa la tela sintética que con la ayuda de la tecnología es más barata, “es una lucha que se tiene que continuar para preservar e impulsar en las escuelas las tradiciones de los pueblos indígenas”.
Comentó que el “arte” a veces se concentra en espacios como las casas de cultura, “en donde a veces no se propone que las personas preserven los conocimientos de nuestra cultura antigua, se promueven talleres modernos dejando atrás la identidad y la esencia de lo que es nuestra cultura que ya no está visible, pero que muchos la sentimos para que resurja en este tiempo”.
Finalmente, dijo que actualmente se ha perdido la conexión con la naturaleza y la tierra, “una de esas formas de conectarse con la tierra es tocándola, manipulándola y sintiéndola; de esta manera, se pueden despertar los sentidos de los jóvenes para que se orienten hacia el arte”.
