Lleva Encierro Solar a través del MACO
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Arte y Cultura

Lleva Encierro Solar a través del MACO

La autora desarrolla un performance durante 20 días, en los que aborda la “vivencia y transformación del tiempo y espacio físico, psicológico y artístico en estos días de amenazas invisibles”


Lleva Encierro Solar a través del MACO | El Imparcial de Oaxaca

Antes de la pandemia del Covid-19, la artista Elvira Santamaría había decidido realizar un performance durante 20 días, es decir, un mes del año Solar “en la rueda del tiempo de los pueblos indígenas mesoamericanos”, pero que tras la conquista española dejó de existir como manera de “medir el tiempo terrenal-cósmica”. Sin embargo, su propuesta Encierro Solar, Códice Oaxaca, fue afectada y la autora tuvo que adaptar el performance a la actualidad.

Sin el público que ha considerado esencial para su obra, Santamaría cuenta que ha tenido que recurrir a las redes sociales y plataformas digitales para compartir el performance desde las instalaciones del Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca, MACO.

Desde el primer minuto de este lunes, con el personal ausente y desde una transmisión en vivo, el Encierro Solar, Códice Oaxaca, se puede ver vía Facebook, en la página MACO Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca. También por Instagram: MACOaxaca, y YouTube: Imagen MACO.

“Ya tenía planeado enfocarme en el concepto del tiempo y hacer una pieza larga, de 20 días o 210 horas. Pero con el coronavirus, la contingencia y todo, pensé que ya no se realizaría porque la obra tiene que ser en vivo y en directo”, describe Elvira, quien reconoce que la pandemia ha venido a romper con las formas de ser, de trabajar, de pensar y de amar. Aun así, piensa que el tiempo que se vive es una oportunidad para reflexionar sobre los cambios y si como humanidad es posible empezar a experimentar, cambiar y adaptarse.

Y ahora que comparte la obra, a propuesta del MACO de adaptarla a la emergencia sanitaria, Elvira se enfrenta a las condiciones impuestas por la nueva enfermedad a través de su arte, como una manera de no parar. En cambio, sí en adaptarse, proponer, reflexionar sobre los medios y posibilidades para seguir en contacto y para humanizar las tecnologías y medios que se tienen.

“Que no sirvan solamente para un entretenimiento, sino ejerzan su cometido de comunicación. Y eso para mí es un reto”, externa la artista sobre las transmisiones que se harán vía redes sociales y plataforma digital. En especial cuando ha estado acompañada por el público en sus presentaciones. Y si antes se enfrentaba a la posibilidad de que alguien sólo estuviera un minuto y se retirara, ahora tendrá que conocer las reacciones a través de las pantallas, en donde las y los espectadores decidirán cuánto tiempo observar su performance y desconectarse de la transmisión.

“Yo planteo obras de larga duración en las que te puedes quedar dos minutos o te puedes ir, o quedarte un ahora. Y hay gente que se queda muchas horas conmigo. Ahora, a través de la cámara, no podré ver a la gente, no podré sentir que entra al espacio. Todo esto viene a afectar fuertemente la forma de arte vivo que hemos practicado los artistas del performance. Sin embargo, creo que es hora de tomar el reto y observar qué posibilidades hay”, ahonda.

Desde la primera hora de este lunes, Elvira Santamaría comparte su performance desde el MACO. Cada día durante las casi tres semanas de duración, se transmitirá un momento de la acción y el público podrá verla en los horarios establecidos para ello, mismos que estarán disponibles en la página de Facebook del MACO.

Con un periodo cuyo término coincidirá casi con el que se ha planteado para el levantamiento de las medidas sanitarias en el estado y el país, la propuesta de la autora es también una forma de mostrar que en las artes se sigue trabajando. Además de una experimentación que tiene la posibilidad de convertirse en “una gran aventura, un horizonte o un espejismo”. Y consciente de que no sabe lo que pasará, espera que el público se una a las transmisiones para conocer cómo se va conformando este códice, el que tendrá por momentos algunos testigos, los colaboradores del MACO.