La crisis en que ha envuelto el gobierno de Donald Trump al mundo con la daga arancelaria pendiendo tanto sobre las remesas como en inversiones de estadounidenses en el extranjero, al trasladar factorías norteamericanas instaladas en nuestro país al norte del Río Bravo, han puesto en jaque a los estados mexicanos más industrializados como Nuevo León, Tamaulipas, Ciudad de México, Baja California y Baja California Sur.
El año pasado, la inversión extranjera directa llegada de Estados Unidos a Oaxaca apenas representó 22 millones 400 mil dólares y tuvo su mayor registro entre enero y marzo del año pasado; en el primer trimestre de 2024 el arribo llegó a 19 millones 100 mil dólares.
Sin embargo, esa suma es raquítica si la comparamos con el alud que representan las remesas, producto del trabajo de los paisanos en Estados Unidos, que se reciben al sur del Río Bravo en algún punto de la geografía oaxaqueña.
De acuerdo con las estadísticas de la Secretaría de Economía y del Banco de México, el monto en remesas que enviaron los paisanos mexicanos a las familias oaxaqueñas representó 3 mil 433 millones 455 mil dólares en 2024, un repunte de 6.8% o 219 millones 406 mil dólares más que en 2023.
Del cruce de datos entre el Banco de México y la Secretaría de Economía federal se desprende que los envíos de los oaxaqueños multiplican por 153.3 veces el monto de Inversión Extranjera Directa (IED) que llegan como capitales estadounidenses a Oaxaca.
IED privilegia eoloelectricidad
En un espectro más amplio, el total de la IED que registró la Secretaría de Economía a Oaxaca fue de 82 millones 82 mil dólares invertidos en nuestra entidad primordialmente de apenas 6 países del mundo.
Las naciones que confiaron un poco su dinero a Oaxaca el año pasado se centra en: Alemania, Argentina, Brasil, Canadá, España, Estados Unidos y pequeños capitales de otros países. Suiza retiró una discreta inversión de un millón 400 mil dólares que mantenía en territorio oaxaqueño.
Paisanos, los mejores inversionistas
En 2024 Oaxaca reportó 82 millones de dólares como IED; en este tenor, los envíos de remesas multiplicaron por 41.8 veces el monto global de inversión extranjera registrada en Oaxaca; la IED, en términos generales, apenas fue 2.3% del monto global de envíos de dinero de Estados Unidos a las diferentes comunidades del estado.
Estados Unidos no es el principal país inversionista en Oaxaca, de hecho apenas ocupa el tercer lugar de acuerdo a estadísticas históricas. Con cifras de la Secretaría de Economía, el principal socio comercial sería Bélgica, reflejada esa inversión en la comprar de la Cervecería del Trópico.
Inversión cervecera
El 29 de junio de 2012, AB InBev anunció la compra del 49% restante de Grupo Modelo por la suma de 20 mil 100 millones de dólares, parte de los cuales se registraron en Oaxaca.
El segundo mayor inversionista en Oaxaca es el capital español centrado en la generación en plantas eoloeléctricas, principalmente a través de parque instalados en el Istmo de Tehuantepec; es el mismo caso de Francia, que ha colocado capitales en generación de electricidad a través de parques eólicos. Ese país invirtió el año pasado 12 millones 900 mil dólares en energía generada por el viento.
El mejor año en cuanto a Inversión Extranjera Directa a Oaxaca lo fue 2023, en que llegaron capitales productivos por 1 mil 942 millones 600 mil dólares. En ese año, con un arribo de remesas por 1 mil 193 millones 573 mil dólares. De hecho, esa es la única ocasión en que el ingreso de capitales productivos a Oaxaca superaron el histórico de envío de remesas desde que se tiene registro, 2006.