El sábado pasado -Sábado de Gloria-, la opinión pública se estremeció con el hallazgo de pedazos de cuerpo humano, hallados en zonas diferentes de Santa Cruz Xoxocotlán, un municipio cercano a la ciudad de Oaxaca que en lo que va del año ha sufrido el flagelo de la delincuencia, pues han ocurrido ahí, alrededor de 13 asesinatos.
Ese sábado, poco después de las 7 de la mañana, en la calle, Camino Viejo a San Bartolo, esquina con privada de Eduardo Vasconcelos, fue hallado una bolsa negra, en cuyo interior se encontraba una maleta, la cual contenía el dorso de un hombre.
Posteriormente, a los pies del monumento a Juárez, que se localiza en una rotonda, también en Santa Cruz, Xoxocotlán, fue hallada otra maleta, la cual guardaba en su interior las extremidades inferiores.
Eso fue el sábado, pero este lunes, poco antes de las 10 de la mañana, personas que se dirigían a visitar a sus familiares al penal de Tanivet, descubrieron al pie del tablero que identifica al Reclusorio Femenil, una bolsa roja con otra bolsa negra en su interior, la cual contenía la cabeza humana, con cal, como el resto de los cuerpos hallados en Xoxocotlán, pues ya se encontraban en estado de descomposición.
El hecho de dispersar pedazos de cuerpo humano y dejarlos en lugares públicos, envían un mensaje de terror a la ciudadanía, independientemente del grado de enfermedad mental de los asesinos.
La cabeza humana hallada, será sometida a examen de ADN para corroborar si ésta corresponde a las extremidades inferiores, y al dorso, y viceversa, o corresponden a otro cuerpo humano.
Lo cierto es que en jurisdicción de Santa Cruz Xoxocotlán, hay un hombre desaparecido que tiene o tenía tatuajes en los brazos, similares a los restos encontrados en Xoxo. Un familiar de éste, al identificar la ropa y los restos, sin cabeza, aseguró que correspondían a su familiar, por lo que pidió se lo entregaran y cuando apareciera la cabeza, hicieran lo mismo, porque estaba seguro que era su familiar.
De todas formas, para cerciorarse de ello, los restos serán sometidos a exámenes de ADN.
Este lunes, el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Capitán de Fragata, Iván García Álvarez, en la conferencia de prensa del gobernador Salomón Jara, hizo unas declaraciones erráticas al señalar que el cadáver fue sembrado y que provenía de otra identidad. Su intervención fue así: “En estos momentos se encuentra la Fiscalía en ese lugar. Me indica el director (inaudible) que le están dando seguimiento; todavía no determinan si es una extremidad o una cabeza. Menciona que es un cuerpo con un olor fétido, es un cuerpo que lo sacaron de otro lugar, lo trajeron, lo metieron, vinieron y lo tiraron ahí. La realidad es que no es del estado de Oaxaca, lo trajeron de algún otro estado y lo están sembrando ahí. En un seguimiento, el golpeteo es más fuerte del Estado ya con ellos y obviamente hay inconformidades. No están a gusto, vamos, entonces buscan causar psicosis. Ese rechazo, a veces de la sociedad en ciertos aspectos, de medidas que se están tomando, pues la realidad de todo esto, es que hay grupos delictivos y hay actores también por esa parte”.
Entonces, ¿la delincuencia importa ya cadáveres para traerlos y sembrarlos en Oaxaca? ¿Qué quiso decir el Secretario de Seguridad? ¿Engañar al gobernador al señalar que no hay crímenes en Oaxaca, cuando la realidad es otra? ¿Pretende ocultar su ineptitud a través de este tipo de declaraciones?
Hay datos concretos en el sentido de que una persona que vive en Xoxocotlán ha reclamado el cadáver, pues está segura que corresponde al de su hijo, entonces, ¿de dónde saca el titular de Seguridad Pública que ese cadáver no es de Oaxaca?
Lamentables las declaraciones de Iván García Álvarez que muestra su inexperiencia en temas del fuero común. Tendrá que aprender, pero los tiempos de Oaxaca no están para eso. ¿O sí?
Lo que sí es necesario, es que el secretario de Seguridad se ponga a trabajar por el bien de Oaxaca, pues sus resultados han sido insignificantes.
Por ejemplo, las cifras son escalofriantes, pues los homicidios van a la alza, ni qué decir de los feminicidios, los cuales dejan mal parados al gobierno de la 4T.
Y es que está visto que, por ejemplo, en la ciudad de Oaxaca de Juárez y municipios conurbados, la vigilancia de la Policía Preventiva es deficiente. A diario, tipos en motocicleta se dedican a asaltar a personas, sin que la policía haga algo por detenerlos. También hay robo de vehículos y de motocicletas. ¿Y la vigilancia?
Ahora bien, en un tono de suspicacia, ¿no será que los cadáveres vengan de Polanco?
