En su último día, la feria por la Virgen de la Soledad mantuvo afectaciones a la circulación vial y peatonal en el centro histórico de la capital oaxaqueña. Por la colocación de lonas, anafres y otros objetos, el paso por las calles era complicado.
Desde el 16 de diciembre y hasta ayer lunes, aproximadamente 200 o más puestos y juegos mecánicos permanecían a lo largo de la avenida de La Independencia, las calles Galeana, Victoria y Mier y Terán, sí como en parte de la calzada Madero y las escaleras frente al ex convento de San José.
Como todos los días de la festividad, la circulación vial se mantuvo desviada hacia calles como Trujano o incluso hacia el periférico.
En tanto, en el trío de la Basílica Menor de La Soledad, la basura y algunas mesas y sillas permanecían en el lugar.
El aceite y restos de comida ya se observaban en parte de las alcantarillas o rejas del pavimento. Además de que en algunas zonas el cable colocado a ras de suelo representó riesgos para transeúntes.
Tanques de gas a media calle o puestos junto a inmuebles con riesgo de caída, así como el tendido de cables y mecates por la zona fueron otros de los riesgos a los que se enfrentaron paseantes y transeúntes.
La colocación de anafres y comales en las calles se mantenía este lunes, lo mismo que los mecates atados a la herrería de los ventanales u otras partes de los inmuebles cercanos.
De acuerdo con el dictamen del cabildo, la autorización de la verbena o feria contemplaba únicamente la colocación de un aproximado de 60 puestos de antojitos regionales, artículos religiosos y otros productos. No había autorización para juegos mecánicos, explicó la regiduría de Comercio en Vía Pública, que como estos destacó la disminución de días para la feria.
Sin embargo, los juegos mecánicos se instalaron desde la noche del día 15 y madrugada del 16. A raíz del desacato, la Dirección de Comercio en Vía Pública tuvo que “tolerar” la feria como habitualmente se ha realizado.
