Avenida de Tlaxiaco, sin banquetas para el peatón
El 80% de los habitantes no están dejando banquetas, construyen sus bardas sin importarle la vida de los demás, afirma vecino
La falta de banquetas en la Avenida de la Salud, del Barrio de San Pedro, es porque los vecinos no tienen civilidad y humanidad, ya que esta vía es transitada por personas que van al hospital y de estudiantes del Colegio de Bachilleres (Cobao).
Feliciano Chávez, vecino de esta calle, dijo que ha otorgado dos metros de banqueta a fin de ofrecer al peatón una forma segura de caminar. Reprueba que muchos de sus vecinos han cerrado el paso; otros solo están ofreciendo 80 centímetros para caminar y eso no sirve, “debemos pensar que una familia conformada por la mamá, papá y un hijo no cabe en ese tramo de banqueta y exponen sus vidas”.
El 80% de los habitantes de esta calle no están dejando banquetas, construyen sus bardas sin importarle la vida de los demás, “están equivocados, porque si donaran los espacios también a sus hijos y nietos les será de utilidad; además, la circulación será ágil”.
El vecino enfatizó que “es deber de la ciudadanía dejar banquetas amplias, eso demostraría que pensamos en nuestros semejantes y en nosotros mismos, ya que en unos años seremos personas mayores de edad y vamos a necesitar de esos espacios para caminar”.
PENSAR A FUTURO
Lograr banquetas de dos a tres metros es pensar en nuestra vejez, porque nos da garantía ante las diversas discapacidades, se puede pasar por ellas con toda la comodidad posible. Hasta podemos admirar aquellas casas bonitas que hacen las personas sin temor a que un vehículo te arrolle, señaló Feliciano Chávez.
Con banquetas amplias las familias tendrán la facilidad de caminar todos juntos, pero cuando son angostas no queda más que arriesgarse a que un vehículo los arrolle.
Chávez comentó que una de sus vecinas tiró la mitad de su casa para generar una banqueta amplia; este es un acto de humanidad porque seguramente ha pensado en todas las personas que serían beneficiadas con las banquetas.
Se debe contar con banquetas amplias con el fin de lograr espacios dignos para los discapacitados, las personas mayores de edad y para los niños, por lo que el llamado es para que los vecinos hagan conciencia y dejen –por lo menos– dos metros de banqueta.
