Trabajo voluntario
Oaxaca
La Capital Los Municipios
El Imparcial del Istmo El Imparcial de la Costa El Imparcial de la Cuenca
Nacional Internacional Súper Deportivo Especiales Economía Estilo Arte y Cultura En Escena Salud Ecología Ciencia Tecnología Viral Policiaca Opinión

Columna

Trabajo voluntario

Puedes ofrecerte como voluntario para ayudar a otras personas, como familias que perdieron su hogar después de un desastre natural


  • Trabajo voluntario
  • Trabajo voluntario
  • Trabajo voluntario
  • Trabajo voluntario

Has visto a personas necesitadas en las noticias después del sismo magnitud 8.2 que afectó Oaxaca y Chiapas y, del sismo de 7.1 que aquejó a la Ciudad de México, Morelos y Puebla.

Entonces, ¿qué puedes hacer para ayudar a las personas que lo necesitan? La respuesta es “¡el trabajo voluntario!”.

Ayúdate a ti mismo ayudando a otros

El trabajo voluntario ayuda a otros, pero también puede ayudarte a ti. Si estás triste por algo que ha ocurrido, como un sismo, huracán u otro desastre, hacer algo por eso puede ser una excelente manera de enfrentar tus sentimientos.

El trabajo voluntario también te permite ver tu propia vida de nuevas maneras. A veces, es fácil preocuparse por cosas como las calificaciones o sentirse mal por no tener el calzado más costoso o el último juego de computadoras.

Con frecuencia, las experiencias del trabajo voluntario te llevan a un ambiente diferente y te exponen a personas y situaciones con las que no habrías tenido contacto en tu vida habitual.

Sabrás que, gracias a ti, algunos niños tienen abrigos, gorros, guantes y botas. Por lo tanto, ya sea que se trate de ropa, alimento, el trabajo voluntario significa algo muy importante: tú puedes ayudar a cambiar el mundo.

Tu espíritu voluntario

Cuando escuchas la frase “trabajo voluntario”, probablemente piensas en proyectos importantes, como construir viviendas, alimentar a damnificados o enseñar a los niños a leer. Pero puedes demostrar tu espíritu voluntario cualquier día de la semana. ¿Cómo? Siendo servicial con tu maestro en la escuela o con un estudiante o una persona quien recibe burlas.

¿Por dónde comenzar?

La escuela es otro excelente lugar para comenzar. Pregúntales a los maestros, al consejero de tu escuela o a la bibliotecaria si tienen ideas.

En algunos lugares, buscan voluntarios de 12 años o mayores, según el trabajo. A veces, los niños comienzan el trabajo voluntario junto con sus padres. Por ejemplo, tal vez seas demasiado pequeño como para preparar alimentos en un comedor, pero si tus padres son voluntarios, es probable que puedas ir con ellos y dar una mano.

Cosas para hacer con tus padres o familiares

El trabajo voluntario es una excelente manera de disfrutar en familia. Habla con tus padres o tus hermanos y averigua qué les podría interesar hacer. Busca algo con lo que todos estén de acuerdo, como por ejemplo:
-Limpiar un parque o la orilla de un río.
-Plantar árboles o flores en la comunidad local.
-Servir alimentos en un refugio para personas sin hogar.
-Entregar alimentos a personas mayores o enfermas confinadas en sus casas.
-Limpiar una escuela u otro edificio público.
-Realizar un recuento de animales silvestres o plantas para grupos ambientalistas.


aa

 

Relacionadas: