¿Recuerdas la escena de Los Simpson donde Homero se queja del tráfico? “Acelero, freno, claxon… Acelero, freno, claxon”, dice. Próximamente, podrías despedirte del tráfico de la CDMX, cuyo nivel se incrementa en diciembre, porque vas en tu auto volador.
La empresa china Xpeng Aeroht busca que perder horas de tu vida en el tráfico sea cosa del pasado.
Pruebas
La startup —fundada en 2013 por Zhao Deli, de 45 años, quien abandonó la escuela secundaria— ha realizado dos pruebas de un auto volador, que podría ser producido en masa en 2025. Se prevé que el vehículo tenga un precio cercano de 140 mil dólares, unos 2.7 millones de pesos.
Hasta ahora, la startup Xpeng Aeroht de China ha realizado dos vuelos públicos inaugurales para su auto volador. El ejercicio de 90 segundos del auto volador realizado cerca de la icónica isla Palm Jumeirah, en Dubai, fue seguido por otro en Guangzhou, China.
Durante la primera prueba, cientos de pe personas se asombraron cuando el auto de dos plazas, con alas de gaviota se elevó aproximadamente a 30 metros sobre sus cabezas, antes de descender suavemente a tierra.
Tanto Zhao Deli como He Xiaopeng y otros patrocinadores apuestan fuerte a que el auto volador puede superar los obstáculos regulatorios y capturar una porción de lo que se considera un mercado de mil millones de dólares que podría redefinir la manera en que nos trasladamos.
“El auto volador se está acercando a la realidad y creemos que era el momento adecuado para participar”, dijo Brian Gu, presidente de Xpeng Aeroht durante la exhibición en Dubái.
Pese a las declaraciones de Gu, empresas con ideas de un auto volador similares como Lilium NV, Joby Aviation Inc. y Archer Aviation Inc. cautivaron a los inversores con cotizaciones multimillonarias, pero ahora cotizan cerca de mínimos históricos. KittyHawk, del cofundador de Google, Larry Page, cerró en septiembre.
Los inversionistas quieren encontrar “el Tesla de la industria de los autos voladores”, dijo Zhang Junyi, socio de la consultora Oliver Wyman; sin embargo, el mercado podría tardar entre 10 y 15 años en florecer. “Invertir en la industria de los autos voladores es un maratón difícil”, señaló.
Así es el auto volador chino de Xpeng Aeroht
El prototipo volado en Guangzhou hace que Aeroht se destaque. Si bien ya hay aviones eléctricos de despegue y aterrizaje vertical, carecen de ruedas y no se pueden conducir en tierra.
El modelo de sexta generación de la compañía china es un automóvil real que también funciona en la carretera. Parece un automóvil de lujo en lugar de un pequeño avión con ruedas.
De hecho, el modelo está diseñado para ser conducido en carretera más de 90 por ciento del tiempo y solo volar cuando hay atascos u obstáculos.
Zhao Deli explicó en una entrevista que el automóvil tiene cuatro motores eléctricos y ocho hélices.
Agregó que conoció a He en 2020 después de luchar durante aproximadamente una década para evitar que su startup se hundiera. Afirma que se ganó al empresario con una demostración. “¿Hablar primero o volar primero?” Zhao dijo y He respondió “¡Vuela primero!”
No mucho después de esa reunión, He y Xpeng invirtieron en la puesta en marcha de Zhao y la rebautizaron como Xpeng Aeroht. Con sede en Guangzhou y centros de I+D en Shenzhen y Shanghái, el unicornio se ha expandido de una docena de empleados en 2020 a más de 700 empleados a partir de julio.
Al hablar sobre las baterías de su auto volador, Zhao explica que la tecnología aún no está completamente desarrollada.
Depende del desarrollo de baterías con mayor densidad porque los autos voladores necesitan más empuje y son más sensibles a las cargas. Las baterías que Aeroht ahora emplea en prototipos son productos de laboratorio de proveedores nacionales.
Otro problema es que hasta ahora ningún país ha contemplado seriamente la apertura de su espacio aéreo a baja altitud en el corto plazo, especialmente para los aviadores sin formación de pilotos. Sin embargo, China ha designado recientemente un puñado de provincias, incluidas Hunan, Jiangxi y Anhui, para explorar el concepto. Eso da esperanza a nuevas empresas como Aeroht, que está trabajando con los organismos reguladores del país para encontrar ubicaciones para las pruebas.
Vía El Financiero con información de Bloomberg.
