Marcelino Coache Verano, reconocido activista de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) y dirigente sindical en el ayuntamiento de la ciudad de Oaxaca, ha resultado herido en un violento ataque a balazos ocurrido cerca de la colonia González Guardado, en Villa de Zaachila. El incidente ha generado gran preocupación entre sus seguidores y en la comunidad local.
LOS HECHOS
Según los primeros reportes, el ataque ocurrió la mañana de este martes, cuando Coache fue alcanzado por varios disparos. Tras el incidente, el activista fue trasladado al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Oaxaca. De manera extraoficial, según información proporcionada por familiares, su estado de salud se reporta como estable. Aunque se encuentran a la espera de los reportes médicos oficiales para conocer más detalles sobre su condición.
Hasta el momento, las autoridades no han proporcionado detalles sobre las posibles motivaciones del ataque ni han establecido una línea de investigación clara. Tampoco se ha obtenido declaración alguna de familiares o compañeros del activista. Quienes están centrados en su recuperación y en las gestiones para su seguridad.
ANTECEDENTES
Marcelino Coache ha sido un personaje en la vida política y social de Oaxaca. En diciembre de 2006, fue detenido por la Policía Federal Preventiva junto con Flavio Sosa y otros dos miembros de la APPO en la Ciudad de México. Posteriormente, el 4 de marzo de 2009, Coache sufrió un secuestro por parte de tres hombres en Oaxaca. Durante ese ataque, fue brutalmente golpeado y torturado durante varias horas antes de ser liberado. El mismo mes, su hijo Edgar Coache fue amenazado de muerte por individuos desconocidos. Lo que intensificó la preocupación por la seguridad de la familia.
A lo largo de los años, Marcelino Coache y sus defensores han estado buscando que se procesen a los responsables de las violaciones de derechos humanos ocurridas durante la crisis política de 2006 en Oaxaca.
TOMAR CARTAS EN EL ASUNTO
En respuesta a los crecientes incidentes de violencia, el nuevo gobierno del estado de Oaxaca ha manifestado su compromiso de colaborar con los defensores de los derechos humanos para enfrentar la intimidación y mejorar la seguridad en la región.
Por otra parte, la comunidad local, así como organismos nacionales e internacionales, observan con atención el desarrollo en este caso, esperando que las autoridades tomen medidas decisivas para garantizar la justicia y la seguridad de activistas y luchadores sociales.