El huevo se ha convertido en un producto inalcanzable para la mesa de los consumidores oaxaqueños con un aumento anual de 40.29 por ciento en un año, de julio de 2021 al mismo mes de este 2022, arrojan los resultados del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) difundido ayer por el INEGI.
En Oaxaca, el huevo es cuarto producto de entre 55 artículos de la canasta básica con mayor aumento en su precio en este 2021, con 30.02% de enero al 31 de julio, superado apenas por el jabón de tocador, con 37.1% en este año y los aceites comestibles que continúan con su irrefrenable crecimiento para alcanzar 35.3% en 2022.
La ciudad de Santo Domingo Tehuantepec sigue siendo, por tercer mes consecutivo, la ciudad más cara del país, con una inflación de 11.25 por ciento, 3.10 puntos porcentuales por arriba del promedio nacional que es de 8.15%. Oaxaca de Juárez no sale del top ten, está en el lugar 10 como la más cara, con una inflación de 9.56%, está 1.41 puntos porcentuales arriba de la media en el país.
En un recorrido realizado por el reportero gráfico, Adrián Gaytán, por el Mercado de Abasto al promediar la mañana de ayer, el cono del básico se “cotizaba” (como la acción de una gran empresa) en 75 pesos. Una tienda de conveniencia de origen oaxaqueño pedía 78 pesos por el mismo cono, aunque en algunos lugares se llega a pedir hasta en 90 pesos.
De acuerdo con consumidores consultados, se ha puesto de moda consumir el huevo orgánico, por cuyo cono se pide entre 120 a 150 pesos, de acuerdo al establecimiento. Una sola pieza de blanquillo llega a costar 3 pesos en un changarro o tienda de barrio.
En el caso de la zona metropolitana de Santo Domingo Tehuantepec, que comprende municipios como Salina Cruz, Petapa, Ciudad Ixtepec, el propio Tehuantepec y Juchitán, entre otros, el huevo es el tercer producto con mayor aumento, 39.8%, poquito menos que en la capital. Para los istmeños es en la harina de trigo, con 54.9%, el mayor estrago causado por la inflación.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía reporta que para la zona metropolitana de la Verde Antequera y sus 24 municipios conurbados una carestía anual de 9.56%. En Oaxaca y en el país, el aumento de precios continúa marcando máximos históricos y siguen siendo los aumentos en básicos más altos en 21 años.
Apenas el 4 de mayo pasado el gobierno federal, en voz de Andrés Manuel López Obrador presentó el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic) al “congelar” 22 de los 40 productos de la canasta básica para evitar que sigan erosionando el poder adquisitivo de los consumidores, pero el objetivo no se ha alcanzado.
Veamos el crecimiento de los precios en Oaxaca de algunos productos de ese programa: la carne de res, por ejemplo, ha encarecido 9.90% sólo de enero a julio de 2022 y acumula un incremento anual de 19.12. Los aceites comestibles 44.1% en un año y 15.8% para los primeros 7 meses del año.
Enfermarse, un lujo
La inflación para el estado es de 10.9%, pero la leche ha experimentado un incremento de 18.33%. En plena pandemia, por ejemplo, las medicinas homeopáticas aumentaron 23% y 9.77% los medicamentos en general. Los materiales para curación aumentaron 11.5% y medicamentos contra la diabetes en 9.66%.
A pesar de las promesas del gobierno de mantener estable el precio de la electricidad, el energético ya experimenta en Oaxaca un aumento de 11.02% en el año y para Tehuantepec es de 6.84%, sin embargo, esta zona del estado es beneficiada por la tarifa diferenciada de verano por el intenso calor y el uso de aire acondicionado en las viviendas. Esta tarifa terminaría el 31 de octubre y de la cual no gozamos los vallistas.
