(II PARTE)
Luego de explicar su trayectoria profesional y laboral en el Poder Judicial de la Federación (PJF) a través de la carrera judicial, la magistrada Adriana Alejandra Ramos León, presidenta del Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil y Administrativa del Décimo Tercer Circuito, considera que tras la reforma dará paso a una nueva época en el sistema de justicia y añade que de participar en la contienda, enfrentará una serie de retos.
La reforma
“La reforma nos ubica en un escenario de cambio, por la forma en que se ha dado y propuestas que se generan, nos ha ubicado en un escenario muy complicado a nivel nacional, vemos la serie de reflexiones y críticas que se hacen y se están haciendo a la reforma, pero definitivamente una de las consecuencias que veo es que el Poder Judicial de la Federación será diferente, es ya diferente a partir de esta reforma y el discurso que se ha tenido”.
A pregunta expresa sobre ¿Cuáles serán los principales cambios desde su punto de vista?, la magistrada considera que se ha iniciado con una nueva época en este poder, “incluso a nivel jurisdiccional, los criterios de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y de los tribunales colegiados se van agrupando por épocas que coincide más o menos con periodos históricos”.
“Ahora jurisdiccionalmente estamos en la onceava época, considero que definitivamente esto dará lugar a una nueva época porque es un cambio, se nos anuncia que es para tener una mejor justicia, más cercana a la ciudadanía, más pronta y expedita, entonces más allá del debate que ha generado, de la polémica e impugnaciones que se ha generado a esta reforma, más allá de eso, me quedaría con el hecho de que el sistema de justicia definitivamente va a cambiar, incluso que prosperará una eventual impugnación o que caminará, cambiará algunas cosas de cómo está ahora”.
Si es para bien, vamos a lo nuevo
Aunque se ha cuestionado el procedimiento de la aprobación de la reforma, la abogada oaxaqueña dice que de no haber marcha atrás, tiene que buscarse que se pueda mejorar el sistema de justicia en el país.
“Si apostamos a un sistema de justicia más justo, más cercano, más equitativo, más pronto, yo diría vamos, vamos a lo nuevo que nos conduzca a este panorama, a estar con mayor inversión incluso al sistema de justicia porque esto ha sido una de las problemáticas, que nos impide tener un sistema de justicia pronta cuando el número de asuntos rebasan la capacidad material y humana de los órganos jurisdiccionales”.
“Entonces, este debe ser el punto de partida para todos estos cambios que se están dando a nivel nacional; yo creo que como sociedad todos esperamos y me quedaría con esa parte que sí aspiramos todos y todas a una mejora, no solamente en la justicia sino en toda la vida pública y política de nuestro país; esperaría que así fuera”.
Me gustaría seguir desempeñando mi cargo
Aunque su magistratura ya está en juego, Ramos León tampoco pierde las esperanzas de que pueda mantener su puesto.
“Este trabajo es un proyecto de vida, servir a Oaxaca a lo que me dediqué, soy servidora pública actualmente y me gustaría seguir desempeñando mi cargo porque me he preparado toda mi vida profesional directamente a esta función, me gusta, aunque sea una función absorbente porque nos hace dedicarle gran parte de nuestras vidas”.
“No sé cómo se den las cosas para el momento que tenga que tomar la decisión definitiva porque el pasado 12 de octubre pasamos al sorteo y estos entre los que automáticamente pasamos como postulados o postuladas, pero tenemos la opción de declinar; no lo he decidido, pero lo que vaya a decidir, sea donde sea, es seguir ejerciendo mi profesión de la mejor manera; porque me sigo preparando. Actualmente curso una Maestría en Gestión Judicial y que sin duda me va servir en estos tiempos de cambio”.
Pese al gran impacto emocional que le generó la noticia de haber sido elegida en la tómbola, añade que en cualquier escenario “quiero tener una actitud edificante, hacia adelante y seguir haciendo algo por mi estado y país, una de las cosas es eso, cada vez estar mejor preparada, porque también me gusta impartir clases, por eso digo que seguramente el tema de la justicia lo llevaré siempre y lo seguiré haciendo”.
¿Cómo le voy hacer para ser popular?
“Tengo que pensar qué puedo ofrecer en una campaña inédita, porque nunca se ha hecho una votación de esta manera; la justicia se imparte y se tiene que impartir en cada caso particular”.
Aunque será en los próximos días cuando defina si decide contender o no para el mismo puesto, la magistrada reconoce que enfrenta una serie de retos, como alcanzar la popularidad cuando toda su vida le ha dedicado a prepararse en materia judicial.
“Me he preguntado, en caso de participar cómo ser popular si todo el tiempo he estado en una oficina, en la academia estudiando y de pronto salir, hacer una campaña y promocionarme a mí misma, qué ofrecer si realmente la justicia se imparte y se tiene que impartir en cada caso particular no puedo ofrecer nada, no puedo ofrecer una garantía que algún asunto va a resultar favorable a una determinada persona; porque por lo general es favorable para una y desfavorable para otra, entonces lo único que puedo ofrecer es mi trayectoria, mis conocimientos, mis ganas de seguir sirviendo a mi país de esta manera; que para mí, es una oportunidad enorme, pero también una gran responsabilidad”.
La magistrada Adriana Alejandra Ramos León, también reconoce que otra de las dificultades que enfrentaría, es el estigma que se ha hecho al Poder Judicial, sin destacar el valor y la importancia de la trayectoria profesional de quienes lo integran.
“En este contexto, si vamos al voto popular la población tendrá que estar bien informada, conocer nuestras trayectoria profesional y laboral para que puedan valorar quien es el mejor para ocupar estos puestos; entonces aquí las instituciones y los medios de comunicación tienen una gran responsabilidad de hacer una labor objetiva e informativa a la sociedad en general sobre el tema judicial y que puedan saber más sobre el Poder Judicial de la Federación”.
“Si ya nos enfocamos a estos cambios, debemos de tener una actitud edificante; como país merecemos ser un mejor país, necesitamos tener instituciones fuertes y si se trata de fortalecer el Poder Judicial de una manera u otra, creo que merecemos hacerlo y esta es una gran responsabilidad; tenemos exigir que se postulen personas preparadas por la complejidad de los asuntos”.
“Que lleguen personas muy bien preparadas”
De perder su cargo como presidenta del Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil y Administrativa del Décimo Tercer Circuito, lo único que la magistrada desea es que pueda ser reemplazada, por alguien con más preparación, capacidad y compromiso.
“Si vienen otras personas y que nos digan estoy más preparado que tú y puedo ejercer mejor la función, les diría ¡qué bueno! porque todos queremos eso y si para mí sigue habiendo espacio y la gente me diera su voto de confianza, por mi experiencia, con mucho gusto seguiré ahí.
“Desafortunada o afortunadamente, si decido participar en este proceso de elección, me obliga a incursionar en un ámbito del que había estado, como apartada; darme a conocer y exponer mi experiencia, preparación y conocimiento en el tema. Al final de cuentas puede ser una tarea fácil, porque tengo la preparación, conozco el sistema judicial, y solo me faltaría mayor popularidad”, apuntó.
El dato:
Actualmente la magistrada Adriana Alejandra Ramos León, tiene 47 años de edad y ha sido ratificada en el puesto; por lo que, de haber continuado, le restaba al menos 33 años en el cargo, ya que lo podían ejercer hasta los 75 años de edad.