Niegan mudanza 7 de 37 núcleos irregulares en Parque de Huatulco
Respetarán viviendas y predios agrícolas, pero desalojarán zonas forestales
Luego que el Presidente Andrés Manuel López Obrador, a través de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), emitió el decreto que establece como una reserva natural protegida parte del Parque Nacional de Huatulco, el gobierno de Oaxaca anunció que se avanza en la reubicación de los asentamientos irregulares.
De los 37 asentamientos irregulares que se detectaron en esta superficie declarada como área natural protegida, solamente siete se negaron a ser censadas por las autoridades municipales, estatales y federales.
Según datos del Gabinete de Seguridad, la superficie que se pretende rescatar abarca hasta las comunidades de Bajos de Coyula y Bajos El Arenal, en donde la mayoría de los habitantes aceptaron la propuesta para ser reubicados.
En el primer censo elaborado por el gobierno de Oaxaca se visitaron 3 mil 303 viviendas, en el que se detectaron 15 localidades rurales factibles de regularizar, así como cinco zonas urbanizables factibles para reubicar a los 37 asentamientos irregulares.
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Se especifica que, en mil 900 viviendas ubicadas en asentamientos urbanos irregulares, el 60 por ciento se encuentran habitadas, mientras en mil 400 viviendas en 15 comunidades rurales, el 80 por ciento estaban habitadas.
En ello, alrededor del 87 por ciento de las familias aceptaron el programa de reubicación y solamente en siete asentamientos irregulares con líderes evitaron el censo elaborado por las autoridades.
En el decreto establecido por el Gobierno Federal establece que el área delimitada será establecida como de reserva ambiental y de manejo sustentable, esto para evitar más invasiones y daños al medio ambiente.
Este miércoles, funcionarios de la Secretaría de Gobierno informaron que se respetarán las propiedades y la posesión de los habitantes que cuentan con viviendas y áreas para uso agrícola, pero en las zonas forestales se establecerá la protección necesaria.
En ese sentido, las autoridades estatales dejaron en claro que no habrá despojo, ya que a los habitantes se les respetará las áreas comunes como escuelas, centros de reunión y otros espacios de vital importancia para las comunidades.
