Aplauden turistas esfuerzos para prevenir desastres
Solo en algunos negocios del Andador Turístico tomaron en serio el ejercicio preventivo
La incertidumbre capturó a propios y extraños en las calles del primer cuadro de la capital; al sonar de la alerta sísmica pocas personas fueron las que tomaron sus precauciones.
11:00 horas.
No obstante, la falta de conciencia por parte de algunos ciudadanos fueron los principales obstáculos a los que se enfrentaron las autoridades en el marco del Simulacro Nacional de Sismo 2023.
Y es que la hipótesis del sismo señalaba una magnitud de 7.5 con epicentro en los límites de Puebla y Veracruz, ubicado a 30 kilómetros al suroeste de Tierra Blanca, Veracruz con una profundidad de 82 kilómetros.
Dicho movimiento telúrico habría sido percibido ampliamente en la zona centro de México y calificado como severo en los estados de Puebla, Veracruz y Oaxaca.
Sin embargo, en los hechos reales, solo algunas personas que se encontraban dentro de negocios del Andador Turístico tomaron en serio el ejercicio preventivo y de forma ordenada salieron a la calle.
Poco después de las 11:00 horas, elementos viales ayudaban a cruzar la calle de Independencia tras la evacuación de los inmuebles históricos y el caminar de algunas personas hacia la plancha del Zócalo.
Se alarman turistas
Turistas nacionales sí se preocuparon por el sonido de las alertas sísmicas dado que no están acostumbrados a los sismos en su lugar de origen.
Llegamos de Querétaro apenas y nos reciben con un terremoto, dice entre risas una mujer de aproximadamente 45 años.
Acompañada de su esposo y tres hijos, se toman de la mano y caminan de regreso al céntrico restaurante en donde estaban desayunando y probando las delicias de la gastronomía oaxaqueña.
Incluso aplaudieron la civilidad con la que personal y ciudadanos tomaron el simulacro; no hubo gritos o empujones debido a lo angosto de las escaleras del sitio gastronómico.
En los pocos minutos que duró el ejercicio de coordinación entre cuerpos de auxilio y seguridad, empleados de varios comercios salieron a las puertas de los negocios a observar la situación.
Otros más hacían bromas entre ellos, dado que no muchos se lo tomaron en serio.