Semana Santa de reflexión, no de diversión, aconseja Barragán

Como parte del pasaje bíblico que se lleva a cabo en la Semana Santa, la iglesia católica celebró el Jueves Santo con la realización de la eucaristía, el lavatorio de los pies y la última cena de Jesús con los doce apóstoles.

En los diferentes templos de la Arquidiócesis de Antequera Oaxaca se recordó que con el jueves santo se inicia con el triduo pascual, que representa el período en que se recuerda la pasión, muerte y resurrección de Jesús.

De los episodios más importantes que se recuerdan en esta fecha, fue la última vez que Jesús se reunió con sus 12 apóstoles para compartir con ellos el pan y el vino antes de su muerte, a este acto se le considera como la introducción de la eucaristía, en la cual Cristo deja su cuerpo y sangre (en pan y vino).

Hoy es jueves santo, jueves de la eucaristía, jueves de la institución del sacerdocio, de la iglesia, nadie ama más que otro que el que da la vida por su amigo, nos había dicho Jesús”, destacó el padre Guadalupe Barragán Oliva, rector de la Parroquia de las Santas Felicitas y Perpetua.

Recordó que en esta fecha, “Jesús nos demuestra cuando dijo tomen y coman todos de él porque esto es mi cuerpo que se entrega por ustedes, tomen y beban todos de él, porque este es el Cádiz de mi sangre, sangre de la alianza, nueva y eterna que será derramada por ustedes y por muchos para el perdón de los pecados, hagan esto en conmemoración mía”.

Por ello, invitó a las y los feligreses a vivir el sacramento con mucha fe y vivir santamente el jueves santo, previo a la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo que se recuerda a partir de este viernes santo.

Los representantes de la iglesia católica, también hicieron un llamado a la ciudadanía para no tomar estos momentos como diversión, sino como un momento de reflexión para enderezar el camino de la vida y a la reconversión.

Durante este jueves santo, las y los feligreses católicos también llevan a cabo la tradicional visita de las siete iglesias para agradecer a Jesús el don de la eucaristía y el sacerdocio, precio al viernes santo donde se recuerda su calvario hacia la cruz.