Piden apoyos para trabajadores de la construcción por pandemia
Los obreros y eventuales quedan desprotegidos económicamente: CROC
Ante la pandemia del coronavirus nadie habla por los trabajadores eventuales de la construcción, en cambio los empleados de gobierno están protegidos con plaza y un salario seguro, alertó la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC).
Tampoco revisan las actuales condiciones de quienes venden el periódico, los tacos, las tortas y es preocupante ante el panorama que se está presentando, admitió el dirigente David Aguilar Robles.
Hay que apoyar al trabajador eventual de la rama de la construcción porque quién le va a dar de comer, y hay mucho niño que tiene que comer, situación que es preocupante para el movimiento obrero.
Debido a la contingencia del coronavirus muchos empresarios en el estado han decidido parar las obras y detener los proyectos de inversión, generando con ello desempleo y mucha preocupación entre los trabajadores de la construcción.
En estos casos los obreros quedan desprotegidos económicamente, al igual que otro tipo de trabajadores eventuales, como los vendedores en plazas y rodantes.
Informó que a través de la dirigencia nacional que encabeza, Isaías González Cuevas, se ha enviado una carta al secretario de Hacienda y la secretaria del Trabajo, para pedirles pongan en marcha medidas de apoyo a las empresas a efecto de que sostengan los empleos y ayudar a los trabajadores con el no cobro de ISR.
Subrayó que la pandemia mundial del coronavirus, está provocando un conflicto económico mundial que puede terminar en el aumento exponencial de la pobreza el desempleo y la desigualdad.
Han planteado que los impuestos al salario y prestaciones de los trabajadores se dejen de cobrar para equilibrar los ingresos que por el ausentismo de clientes están teniendo.
Pidió analizar con detalle, los problemas reales de las empresas y de los trabajadores, para evitar el pánico que puede surgir de la desinformación, o el abandono si simple y llanamente, ante una circunstancia de esta magnitud, nos quedamos todos, cruzados de brazos.
