Luego de confirmarse la noticia del fallecimiento del Papa Francisco, usuarios en redes sociales han comenzado a compartir algunos de los mensajes más emotivos y polémicos que el Sumo Pontífice dejó durante su papado. Uno de ellos ha generado especial resonancia en México: un fragmento de entrevista en el que el Papa advierte que “el diablo le tiene bronca a México”, en alusión a los múltiples desafíos de violencia y dolor que enfrenta el país.
PREOCUPACIÓN DEL PONTÍFICE
En una conversación con la periodista mexicana Valentina Alazraki, el pontífice expresó su preocupación por el contexto nacional, vinculándolo a factores tanto espirituales como geográficos.
“Sí, realmente el diablo le tiene bronca a México, es verdad. Cuando los mismos mártires nuestros, las persecuciones de los cristianos, que son persecuciones que en otros países de América no se dieron con tanta violencia… ¿por qué en México sí? Algo pasó aquí, hay algo especial”, afirmó el Papa Francisco en esa entrevista que hoy vuelve a circular entre fieles y medios de comunicación.
UN VÍNCULO CON LA VIRGEN DE GUADALUPE
Para el pontífice argentino, una posible explicación de este “resentimiento” del mal contra México estaría ligada a la devoción nacional por la Virgen de Guadalupe, figura central en la espiritualidad mexicana y latinoamericana.
El Papa sugirió que el hecho de que la Virgen se haya manifestado en el Tepeyac ante el indígena Juan Diego, según la tradición católica, podría haber desatado la furia del mal sobre este país.
“Es como si el diablo le tuviera bronca a México, ¿no? Si no, no se explican tantas cosas”, agregó Francisco.
Aunque aclaró que su observación no era desde una perspectiva teológica formal, sino como “un hombre de pueblo” que observaba la realidad desde la fe y el afecto por la nación mexicana.
TAMBIÉN INFLUYEN FACTORES SOCIALES Y GEOGRÁFICOS
No obstante, el Papa también fue claro en mencionar otras causas más terrenales que afectan al país. Subrayó que la ubicación geográfica de México, al ser frontera con Estados Unidos y punto de tránsito de personas y mercancías, lo convierte en un sitio estratégico y, por tanto, vulnerable al narcotráfico y a la violencia criminal.
Esta combinación de elementos —espirituales, históricos, sociales y geográficos— fueron, a juicio del pontífice, claves para entender por qué México enfrenta tan duros desafíos.
DEVOCIÓN Y AMOR POR MÉXICO
A lo largo de su pontificado, el Papa Francisco demostró un cariño especial por México. Su visita en 2016 y su profunda devoción por la Virgen de Guadalupe fueron muestra de ese afecto. En cada oportunidad, el pontífice resaltó el papel de la Guadalupana como símbolo de fe, unidad y consuelo para millones de creyentes.
En una de sus homilías por el 12 de diciembre, día de la Virgen de Guadalupe, Francisco reflexionó sobre tres signos del misterio guadalupano: la tilma, la rosa y la maternidad de María. A través de ellos, dijo, se manifiesta la humildad, belleza, sencillez y protección hacia el pueblo de Dios.
“Ella sigue viniendo, sigue caminando con nosotros. La Virgen de Guadalupe no es un recuerdo del pasado, es madre viva de todos sus hijos”, expresó en aquella ocasión.