Ante la presencia de mujeres y hombres, Jorge Rivero Aguilar, presidente municipal de Santo Tomás Ocotepec habló de la distinción que le hacen a la Danza de
la Aguja como patrimonio cultural tangible e inmaterial de Oaxaca y recalcó que este reconocimiento es importante para todos los que guardan los saberes de esta danza, una de las más de las ocho danzas que tiene esta población.
Juan Víctor Ramírez Cortés, director artístico del Baile de la Aguja y de la investigación de la música de oído en los años 80, dijo que fueron días de trabajo y se requirió mucha cooperación del pueblo en este trabajo de recopilación de la música de cuerdas.
Destacó que esta danza lleva más de 14 años participando en Guelaguetza y desde hace más de 100 años se baila en Ocotepec, además participa en el Carnaval de Máscaras que reunió este año a más de cuatro mil disfrazados de las diferentes agencias de este municipio como parte de las actividades milenarias de este pueblo de la Mixteca.
Israel López, diputado local y originario del pueblo hermano de San Miguel el Grande destacó que la cultura une pueblos, la cultura disuelve la violencia y es el camino más corto al desarrollo y armonía.
Nicolás Feria Romero, diputado local, dijo que cuando llegó esta propuesta al Congreso nunca se dudó en respaldar esta idea de hacer este reconocimiento.
“Somos paisanos, es motivo de orgullo cuando los pueblos se organizan para defender la cultura y las tradiciones y Ocotepec lo logró ahora con esta danza que debe ser orgullo mundial”, destacó.
Los presentes en este festejo que se realizó en el IEBO plantel 088 en el municipio de Santo Tomás Ocotepec, bailaron con los invitados la música de cuerdas y se hizo la entrega de los pergaminos que reconocen esta Danza de la Aguja como Patrimonio Tangible e Inmaterial del Estado de Oaxaca.