Tras 6 años, sigue en el abandono templo de Tlalixtac de Cabrera

Seis años después de resultar con daños su Templo Católico, la feligresía de Tlalixtac de Cabrera urge a sus autoridades municipales información sobre los trabajos que van a realizar en el sitio de culto.

Y es que de acuerdo con los pobladores, no hay claridad en la situación que atraviesa la parroquia a San Miguel Arcángel, dado que ni la autoridad municipal o regidores brindan información.

Estela, habitante de Tlalixtac, recuerda que desde hace más de un año se comprometieron las autoridades a componer las bóvedas del templo, pero ya pasó el tiempo y no hay avances.

Abordada mientras espera la salida de su menor hijo quien cursa sus estudios básicos en la institución educativa ubicada frente al templo católico, explica la molestia de gran parte de la comunidad.

Indicaron que desde la realización del Viacrucis, y que atrajo a cientos de personas a la población para vivir la representación en vivo del encuentro de Jesús con María y atestiguar la Crucifixión, se comprometieron a redoblar esfuerzos para avanzar.

No hay avances, tampoco nos dicen o nos llaman a reunión para dar a conocer la obra y el tiempo que se van a llevar los trabajos de remodelación de la parroquia”, expone la madre de familia.

En el mismo sentido, Abraham hombre mayor dedicado a la venta de golosinas, da cuenta de las peripecias que deben pasar quienes acuden los domingos a la celebración de las misas.

Relata que en la época de lluvias, se han llegado a inundar un poco porque el módulo no soporta tanto peso de agua, además de los encharcamientos en los accesos del sitio.

Otro de los inconvenientes se registró en la pasada oleada de calor, debido a que con las velas encendidas y la multitud que se llega a congregar los días de culto, el bochorno es incómodo.

Coincide en hacer el llamado a sus autoridades tanto municipales como estatales y federales, ya que no hay información clara sobre los trabajos que se efectuarán en el lugar dañado por los sismos del 2017.

Sin embargo, el templo aún sigue cerrado a las visitas y cuenta con una cinta de advertencia de peligro en el acceso principal, aunado a que la carpa aledaña ya presenta deterioros.