Luego de sofocar el incendio forestal y cuantificar la superficie afectada de Ventanilla, los brigadistas contra incendios de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), Comisión Estatal Forestal (Coesfo); así como comuneros, señalaron que no hubo daños materiales ni percances que pusieran en riesgo la integridad física de personas.
La semana pasada, día 21, un siniestro forestal impactó, durante poco más de 24 horas, en alrededor de 16 hectáreas consumiendo selva baja caducifolia, “sin embargo, casi nadie, generalmente, no exaltan que los incendios forestales afectan y ponen en riesgo la fauna, nos hace falta más concientización ecológica”, dijo Hugo Castrejón Martínez, edil y ex presidente de los bienes comunales de Tonameca.
El núcleo agrario tiene seis reservas naturales comunitarias, justo en 2018 la Conafor llevó a cabo cursos y talleres de capacitación a brigadas contraincendios. Hugo Castrejón añadió que hace falta un esquema de capacitación más recurrente y que se canalicen las herramientas necesarias para que las brigadas operen en mejores condiciones, “aún cuando la temporada de incendios ya pasó, en la Costa siempre existen probabilidades de siniestros porque el clima siempre es de calor, de mucho sol”, explicó.
Además, también, se requiere de forma permanente se ejecuten programas de concientización ambiental, en radio, televisión, periódicos, e internet para robustecer la cultura de protección y conservación del medio ambiente, “no podemos negar las visitas a nuestras riquezas naturales, montañas, ríos, lagunas, playas, necesitamos explotar el ecoturismo, pero se requiere de responsabilidad ciudadana para la conservación ecológica”, apuntó Castrejón.
El núcleo agrario, de poco más de 26 mil hectáreas, cuenta con las siguientes reservas naturales comunitarias: El Cerrón, Corral de Piedra, Punta Cometa, Cerro San Antonio-Frutilla, Potrero, Laguna Tonameca, y Ríos San Francisco y Tonameca. Además se encuentra en proceso el Ordenamiento Territorial Comunitario (OTC).
Y es que generalmente, explicó el también comunero, muchos de los siniestros forestales son provocados por la negligencia o falta de concientización al tirar colillas de cigarros mientras se viaja, o no apagar totalmente una fogata, por tirar o dejar al descubierto botellas de vidrio vacías. Otros
incendios se dan por la falta de aviso o de ayuda al hacer la roza, tumba y quema de predios, “así es, luego algunos compañeros que para sembrar primero se deshacen de la maleza o huamilera quemando, y el viento les gana, nos hace falta mucho trabajo en todos sentidos para proteger a la madre naturaleza, pues explotada de forma sustentable puede detonar mejores condiciones de vida”, concluyó Hugo Castrejón Martínez.
