Citando a funcionarios del gobierno texano y de Estados Unidos, agencias internacionales han señalado que se superó los 100 muertos este por la inundaciones en Texas, mientras que la posibilidad de encontrar más sobrevivientes se desvanecía tras el cuarto día de búsqueda.
El vicegobernador de Texas, Dan Patrick, reconoció el lunes que las sirenas de alerta de inundaciones podrían haber salvado vidas si hubieran estado a lo largo del río. Añadió que debían estar instaladas para el próximo verano. Las autoridades del condado de Kerr consideraron instalarlas , pero se mostraron reacias ante el precio.
En el condado de Kerr, la zona más afectada por la catástrofe, se han registrado más de 80 muertes, entre ellas 28 menores que se encontraban en un campamento de verano llamado Camp Mystic, situado a orillas del río Guadalupe, que se desbordó a causa de las lluvias. Al menos en ese lugar 11 personas seguían desaparecidas.
El senador Ted Cruz, republicano de Texas, afirmó que se realizaría un análisis minucioso de lo ocurrido para evitar la misma pérdida de vidas en el futuro. El principal demócrata del Senado estadounidense, Chuck Schumer, solicitó una investigación sobre si los recortes en el Servicio Meteorológico Nacional contribuyeron a la cifra de muertos.
Texas sigue recuperando sobrevivientes y hay múltiples historias de la tragedia.
JANIE HUNT, PEQUEÑA DE 9 AÑOS DE OJOS AZULES
El diario EL PAÍS indicó que la primera niña que fue confirmada como fallecida en el campamento se llamaba Janie Hunt. Tenía 9 años, ojos azules, cabello rubio hasta la mitad de la espalda. Horas antes de que fuera hallada sin vida, su madre había dicho a la CNN que estaba rezando para que la encontraran. Tavia Hunt, una prima de la pequeña, dijo que la familia está devastada, pero mantiene la fe.
También el lunes, el alcalde de Kerrville, Joe Herring Jr., advirtió a los residentes que se prepararan para una semana difícil, ya que las posibilidades de encontrar a alguien con vida se redujeron. Aseguró que los equipos de rescate continuarían con sus búsquedas, excavando entre escombros y árboles caídos, mientras se preparaban para la posibilidad de más inundaciones repentinas.
Sarah Marsh, otra niña que murió en la tragedia de Camp Mystic, tenía ocho años y vivía en Alabama. Estudiaba en una escuela primaria a las afueras de Birmingham, en un suburbio llamado Mountain Brook.
CONTEO DE DECESOS
Al menos 84 de las víctimas de las inundaciones, incluidos 28 niños, se encontraban en el condado de Kerr, al noroeste de San Antonio. Siete personas murieron en el condado de Travis, seis en el condado de Kendall, cuatro en el condado de Burnet, dos en el condado de Williamson y una en el condado de Tom Green, informaron las autoridades.
MEXICANO SE AFERRÓ A LA VIDA
Una familia de mexicanos presuntamente está entre las víctimas. La inundación arrastró la casa de una familia de origen mexicano, compuesta por Leonardo Romero, su esposa Natalia y un bebé de dos años, quienes siguen sin ser rescatados. Sólo Leonardo Jr, de 18 años, pudo ser rescatado con vida.
“Lo encontraron aferrándose a los escombros para salvar su vida”, señalaron voluntarios que colaboran en las labores de búsqueda.